El Palencia Cristo asumió el reto de sumar tres puntos más a su cuenta en la siempre peligrosa visita al campo de San Amaro. El Real Burgos es de esos equipos trampa que, si bien no estarán en la zona alta de la tabla, pueden dar un disgusto a cualquiera cuando actúa ante su afición. Los morados superaron la prueba y dan un paso adelante gracias a un tanto de Vallecillo en el tramo final. 
Los palentinos, pacientes y seguros de su apuesta a través del buen trato de balón, no acabaron de sentirse cómodos en una primera parte en la que el rival llevó el partido a su terreno. Los rojipardillos no dudaron en acumular hombres en tareas defensivas y basaron sus opciones en los desplazamientos al espacio. Por su parte, los visitantes tocaron y tocaron por dentro con más buenas intenciones que ideas.
Las ocasiones hasta el descanso fueron contadas. El Real Burgos lo intentó con un disparo complicado de Castro y con una serie consecutivas de corners que no inquietaron a Miguel. Los morados se mostraron muy seguros en las acciones defensivas de estrategia y el problema lo tenían con balón.
Eso sí, el primer aviso correspondió a los anfitriones. Álvaro no acertó a despejar un balón largo y Alejandro lo aprovechó para probar con un  remate que se marchó muy cerca del poste. Era el minuto 15 y en el 23 llegó la respuesta morada, que a punto estuvo de significar el 0-1. Fraile recibió un envío desde la derecha, controló y se sacó un disparo potente que Ibai resolvió de forma providencial. Esa acción pareció espolear a los morados, que dieron un paso adelante en el tramo final de la primera mitad. Eso sí, sin el punch necesario para sorprender a un Real Burgos que nunca renunció a sus opciones de sorprender a su rival.

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