El Becerril se llevó un punto de Salamanca en un partido en el que pudo haberse llevado los tres puntos. El equipo becerrileño sumó su tercer empate consecutivo y s?u quinta jornada seguida si?n conocer la victoria, lo que no le permite salir de la parte baja de la clasificación.
Fue el Becerril el que tuvo las dos primeras oportunidades. La más clara, un penalti a favor que se estrelló en el larguero tras el lanzamiento de Melero. A los cuatro minutos ya había podido adelantarse al lanzamiento de una falta lateral. Y poco después le había sido anulado a los cinco minutos un gol por fuera de juego. Fue una salida casi en tromba de los palentinos, que salieron con las líneas muy adelantadas y con el propósito de gobernar el partido. Lo hicieron en la primera media hora, en la que con un poco de suerte hasta podrían haber sentenciado el encuentro.
Cascajo, el portero local, evitaba el gol del equipo palentino en otra acción en la que superaron los morados una vez más a la defensa charra. También tuvo que intervenir Sevi a remate de Silvas en unos minutos de dominio alterno donde el Salamanca no ponía en apuros a la defensa del Becerril. Pero los salmantinos, en su primera oportunidad clara, poco antes del llegarse al descanso, se adelantaban por medio de Denilson y recibía el Becerril un duro golpe después de haber hecho mayores merecimientos. Gol además psicológico, al producirse al borde del descanso.
SEGUNDA MITAD. La segunda parte comenzó con el debut en estas temporada de Eloy, superada su lesión, y con un juego más pausado, aunque poco a poco el Becerril fue ganando metros y teniendo más la posesión del balón para buscar el empate.
Sin acusar el gol en contra y con mucha confianza en sus posibilidades, hacía intervenir a Cascajo a los dos minutos en una acción en la que el portero salmantino estuvo providencial. Pero fue el Salamanca el que pudo haber hecho el segundo gol y casi haber sentenciado el partido con un remate de Villa que Sevillano detuvo en una gran intervención.
Pero el Becerril buscaba el empate y siguió porfiando. La entrada de Eloy hizo que el equipo morado jugase más ancho e hiciese daño por la banda. Los morados se estiraban sin complejos, aunque guardando la compostura defensiva hasta que consiguió su objetivo por mediación de Miguel Blanco. Quedaba todavía media hora de juego y el Becerril no renunciaba a nada. Entraron Franín y después Rubén Vallejo (que reaparecía tras su lesión) para refrescar el equipo y para buscar más soluciones en ataque, pero el Becerril ya no tuvo la misma capacidad de llegada ante un Salamanca que se defendió bien y que por momentos pareció dar por bueno el empate llegándose al final del partido sin que se registraran nuevas ocasiones de gol.
Sin tiempo para descansar, el Becerril vuelve a viajar mañana a Salamanca, pero en este caso a Peñaranda, en partido en su día aplazado.