El equipo del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (Cenieh), con sede en Burgos, abandona hoy la Cueva de Guantes tras una campaña arqueológica «atípica y condicionada por las circunstancias impuestas por la crisis sanitaria de la Covid-19».

Desde el pasado 24 de agosto en el que los investigadores recalaron en este complejo kárstico a medio camino entre Villanueva de Arriba y Villaoliva de la Peña, en el término municipal de Santibáñez de la Peña, han centrado su trabajo en una cata de nueve metros cuadrados en la que han encontrado, hasta la fecha, restos óseos de una treintena de osos de las cavernas.

«Son, casi todos, ejemplares jóvenes: crías no mayores de un año, la mayoría entre los seis y los nueve meses de edad. Adultos, tenemos, hasta el momento, cuatro identificados», explica el doctor en Ciencias Biológicas y especialista en Paleoecología de Mamíferos del Pleistoceno de Europa, Jesús Rodríguez, director de la excavación junto a Ana Mateos, doctora en Prehistoria y  especialista en Ecología y Fisiología Humana.

Cenieh halla en Guantes restos de 30 osos de las cavernasAunque los osos cavernarios son mayoría, la fauna hallada en la Cueva de Guantes a lo largo de las sucesivas campañas de excavación (la primera en verano de 2008) es rica y diversa. En este tiempo se han recuperado restos de marmotas, ciervos, rebecos, hienas y leones de las cavernas.

Lo que no han encontrado este año son restos que evidencien la ocupación humana de la cueva en tiempos de los neandertales como lascas o restos carbonizados que demuestren la presencia de una hoguera, como sí ocurrió en anteriores campañas.

EQUIPO. Las reducidas dimensiones de Guantes obligan a trabajar con un equipo limitado, que este año se ha visto más mermado aún por el coronavirus. Junto a Mateos y Rodríguez trabajan tres jóvenes recientemente titulados del Cenieh y las universidades Complutense de Madrid y Jaén.

«Aunque somos un equipo más pequeño, hemos trabajado a buen ritmo a pesar de todas las dificultades, porque todos habíamos trabajado ya con anterioridad sobre el terreno», señala Rodríguez.

En cualquier caso, los investigadores cuentan con una subvención de 7.000 euros de la Dirección General de Patrimonio de la Junta de Castilla y León y otra del Ayuntamiento santibañés, que asume los gastos de manutención de los cinco miembros del equipo. «Es importante que en un año como este las administraciones hayan apoyado las intervenciones arqueológicas», subraya Mateos.

Esto les posibilita trabajar en la cueva y continuar la investigación por la tarde desde el laboratorio de campo que habitualmente montan en la vecina localidad de Tarilonte de la Peña.

Los trabajos arqueológicos también se han visto afectados por la pandemia, pues ha retrasado trámites, permisos y preparativos. Esto ha impedido al equipo del Cenieh adentrarse en Villanueva II, la cueva en la que recuperaron 200 huesos de ocho personas hace dos veranos.

Los vecinos de la comarca de La Peña también se han quedado este año sin jornada de puertas abiertas, que se ha sustituido por vídeos en las redes sociales casi a diario en los que se explicaban los avances y su trabajo.