Palencia es, desde hace años, una de las provincias con menor tasa de suicidios de toda España. Según datos consultados por el servicio de Salud Mental del Caupa con el instituto forense, doce personas acabaron con su vida en 2020, una menos que en 2019. No obstante, los pensamientos autolíticos son una realidad para algunas personas y, detrás de muchos fallecidos, hay familiares y amigos que siguen sufriendo.
Con el objetivo de dar cobertura a esos allegados que, la mayoría de las veces, quedan fuera del sistema, en enero de 2020 la Asociación Salud Mental puso en marcha un nuevo proyecto. «La idea era abordar este tema tan personal e individual de manera colectiva, utilizar los grupos de apoyo mutuo para ayudar a la gente a cerrar sus heridas», apunta Raquel Martín. La psicóloga, sin embargo, vio rápidamente la oportunidad de dar un paso más en esta iniciativa y avanzar así en la prevención del suicidio.
«En la asociación tenemos varios usuarios a los que alguna vez se les ha pasado por la cabeza quitarse la vida. Ver cómo se quedan las personas que han perdido de esta forma a familiares o amigos es una buena terapia para prevenir este tipo de actos», afirma Martín, que reconoce que aún queda un largo camino por recorrer puesto que el suicido sigue siendo un «tema tabú» para la sociedad.
Grupos de apoyo mutuo para prevenir el suicidio Hasta el momento, la iniciativa ha beneficiado a casi una veintena de personas, aunque desde la asociación esperan llegar a muchas más. «En Palencia nos conocemos todos y, por eso, hay gente a la que le cuesta participar», reconoce Raquel Martín al tiempo que habla de «historias muy complicadas». En este sentido, las sesiones en base a las que se desarrolla el proyecto actúan como punto de encuentro en el que, a través de la tertulia, los participantes comparten y expresan sus emociones sin temor a ser juzgados. También incluyen una parte terapéutica desde la que se abordan temas como la culpa o el duelo.
«Hay personas que se sienten culpables tras el suicidio de un allegado y otras dirigen su rabia hacia los demás», indica Martín. De este modo, ver que hay gente con los mismos sentimientos puede ayudar a superar ciertos traumas. Por su parte, quienes tienen ideas autolíticas pueden comprobar a través de estos encuentros el hueco que deja en su entorno una persona que decide quitarse la vida y hasta qué punto un hecho de estas características puede cambiar el proyecto de vida de los demás.
Según datos de la Asociación Salud Mental, el suicidio es la principal causa externa de mortalidad en España: diez personas fallecen al día por este motivo, tres de cada cuatro son hombres y entre las personas con esquizofrenia la probabilidad es nueve veces mayor. Por eso, el colectivo propone acabar con los mitos, el estigma y la culpa para facilitar que las personas con ideaciones suicidas pidan ayuda.
«Es urgente la elaboración de un Plan Nacional de Prevención del Suicidio, la actualización de la Estrategia de Salud Mental del Sistema Nacional de Salud y habilitar un teléfono público y gratuito de tres cifras para prevenir este tipo de actos», defienden desde la asociación a la vez que aseguran que «el efecto llamada no se da si se informa con rigor».
PREMIO BUENAS PRÁCTICAS. Hace solo unos días, Salud Mental España entregaba sus III Premios Buenas Prácticas, cuyo objetivo es recoger y reconocer algunas de las mejores iniciativas desarrolladas por sus diferentes entidades, así como ponerlas a disposición del movimiento asociativo como una herramienta de transmisión del conocimiento y la generación de ideas que puedan ser replicadas.
Los premios se han dividido en cuatro categorías: Cuidado y promoción de la salud mental frente al Covid-19, Campañas de sensibilización y visibilización frente al Covid-19, Adaptación de los recursos, productos y servicios de la entidad en 2020 y Nuevos recursos, productos y servicios de la entidad creados en 2020. En este último apartado, el proyecto ganador ha sido Supervivientes del suicidio.
AYUDA CONTRA EL SUICIDIO. La sede de la Asociación Salud Mental de Palencia se encuentra en el número 6 de la calle Asterio Mañanós de la capital (teléfono de contacto: 979 74 63 42 / 693 02 47 05 y horario de lunes a viernes de 08:00 a 15:00 y de 17:00 a 20:00). También cuenta con delegaciones en Guardo (calle Iglesia, 11, teléfono: 611 04 99 78 y horario de lunes a viernes de 10:00 – 14:00 y de 16:00 a 20:00), Aguilar de Campoo (La Calleja, edificio de la Policía Local, teléfonos: 611 04 99 78 – 603 44 476 36 y horario de lunes, martes, jueves y viernes de 08:30 a 14:30) y Herrera de Pisuerga (paseo de Los Tilos, edificio del CEAS, teléfonos: 611 04 99 78 – 603 44 476 36 y horario lunes, martes, jueves y viernes de 08:30 a 14:30).
Además, en España existe un Teléfono de la Esperanza (717 003 717) y el Teléfono Contra el Suicidio (911 385 385), recursos dedicados a la prevención del suicidio, así como la plataforma profesional de prevención del suicidio www.papageno.es, una asociación no lucrativa que busca prevenir el suicidio desde todos los ángulos.