Ni mal ni como para tirar cohetes. Así resume el presidente de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Palencia, Jorge Luis de Miguel, los sanantolines desde el punto de vista de su sector. «Ha estado dentro de lo esperado, en la misma línea que años anteriores», afirma este restaurador.

De Miguel señala que la bajada de temperaturas de los últimos días de ferias se ha dejado notar, sobre todo, entre aquellos hosteleros participantes en la Feria de Día, ya que la afluencia de clientes ha sido ligeramente inferior a otras jornadas. «El frío ha podido dejarse notar más en la casetas, como es obvio, pero eso ha venido mejor a los locales, ya que la gente ha buscado refugiarse en el interior de los bares», aclara.

En este sentido, se muestran satisfechos porque el volumen de clientes se ha mantenido a lo largo de todos los sanantolines y porque se ha visto movimiento en las calles. «Teníamos cierto miedo de que a partir del día 2 de septiembre el ambiente en la ciudad decayera, pero afortunadamente no ha sido así, sino que ha habido gente en los bares y en las casetas todos los días».

Para Jaime Antolín, presidente de la Asociación General de Hostelería, la feria «ha sido una de las más flojas de los últimos años» y asegura que desde su punto de vista se debe  a la falta de programa. «Entre la campaña y las elecciones, creo que era un programa que no estaba bien definido», señala. Para ambos dirigentes del sector hostelero, la zona centro de la capital ha estado «muy vacía» ya que la actividad se ha desplazado hacia la zona del Salón. «En el centro hemos trabajado como cualquier semana del mes de agosto, algo más los primeros días de fiestas pero dentro de lo normal», concluye Antolín.