Ni había que lanzar las campanas al vuelo tras haber vencido en Béjar el pasado sábado a todo un histórico de la ACB como el Movistar Estudantes, ni hay que rasgarse las vestiduras cuando se pierde, como fue el caso ayer en Cigales ante el Carramimbre Valladolid por 81-72.

Las pretemporadas tienen que servir para cargar las pilas, coger la ideal puesta a punto cara al duro inicio liguero y en el caso de Chocolates Trapa Palencia ir poco a poco acoplándose. No hay que olvidar que con la salvedad de Grimau (al que ni el técnico ni la directiva querían que siguiese) el plantel es totalmente nuevo y necesita su tiempo para acomplarse. 

Cierto es que desde el triunfo todo se ve de otro color, pero también que las victorias tapan los defectos y es lógico que a estas alturas de la película el cuadro morado tenga muchos y suyo aprovecharse de ellos el cuadro pucelano, que jugaba su primer ensayo de la pretemporada.

Lo mejor del equipo palentino se vio en el primer cuarto, con una agresiva defensa que dejó a los pucelanos en doce puntos, aunque tampoco hubiese acierto anotador por parte palentina (17). En el segundo cuarto, la intensidad defensiva pasó a mejor vida, encajando un parcial de 25-14. La diferencia de cinco puntos de los pucelanos aumento en uno en el tercer cuarto, con el parcial de 22-21. En el último periodo falló el fuelle, lógico en esta fase de preparación.

Jorgensen (12), Larsen (2), Grimau (4), Kacinas (3) y Dani Rodríguez (2) -equipo inicial- Bader (20), Pradilla (18), Antúnez, Niang (6), Jasaitis (5) jugaron por el Trapa. 

Pucelanos y palentinos volverán a medirse en partido amistoso antes del inicio liguero. Amistoso entre comillas, dado que se trata de la semifinal de la Copa de Castilla y León. Será el 14 de septiembre, a las 20 horas, en el Pabellón Municipal de Palencia. El ganador se medirá cuatro días más tarde al Burgos de la Liga Endesa.