'Mortal kombat 11'

Enrique José Gutiérrez
-

La saga de lucha más brutal y sanguinaria, desarrollada por Warner Bros. y NetherRealm Studios, regresa a PlayStation 4, Xbox One, Nintendo Switch y PC

Dentro de los juegos de peleas, hay una franquicia que tiene un estilo único que lo desmarca de otros títulos similares. Aunque su planteamiento es muy parecido al de los grandes referentes del género, la serie Mortal Kombat siempre se ha caracterizado por no tener miedo de mostrar escenas de gran impacto visual. Ya desde sus inicios, esta saga logró desmarcarse del resto, gracias a una particularidad que ha terminado por convertirse en su seña de identidad más reconocible: los Fatalitys.

En estos despiadados ataques es donde reside la verdadera esencia de la franquicia, permitiendo al vencedor castigar a su oponente de una forma contundente y salvaje. Los hay de muchos tipos, pero todos tienen la brutalidad como denominador común. En ellos, no es extraño contemplar decapitaciones, desmembramientos, huesos rotos y demás lindezas, que son mostradas de una forma muy explícita y visceral. También están los Brutalitys: una variante igual de sangrienta, pero menos elaborada, que se puede ejecutar justo antes de finalizar el combate.

El sistema de juego mantiene las bases que, entrega tras entrega, sus creadores han ido puliendo y perfeccionando. El desarrollo de las peleas es en dos dimensiones, pero abundan los planos en los que la cámara varía su posición, para mostrar las imágenes desde un mejor ángulo de visión (como cuando se hace uso de las técnicas más mortíferas).

Los combos se realizan de forma sencilla, permitiendo que usuarios de todos los niveles disfruten con su propuesta. Sin embargo, los más hábiles serán los que mejor podrán exprimir las múltiples posibilidades que ofrece. Cada luchador tiene un completo set de habilidades, que incluye golpes sencillos, agarres, movimientos especiales, etc.

Es primordial saber medir bien las distancias y usar las técnicas adecuadas en el momento oportuno. Aporrear los botones sin tener una estrategia clara puede servir contra los enemigos de menor nivel, pero lanzarse a lo loco contra un oponente experimentado es poco menos que un suicidio. Por suerte, es posible practicar en los completísimos tutoriales que se han incluido, para aprender los conceptos básicos del combate.

Los escenarios son muy vistosos y están repletos de detalles. En algunos lugares concretos de los decorados hay situados elementos interactivos, que ofrecen una pequeña ventaja adicional a los aficionados que los activen en el momento correcto. En general, se trata de objetos que pueden ser usados como armas arrojadizas, pero también hay zonas que permiten infligir daño adicional a los adversarios.

 

Evolución visual de los personajes

La representación visual de los personajes ha dado un gran salto hacia delante respecto a su predecesor. Toda la plantilla al completo cuenta con un magnífico modelado, que se complementa con unas estupendas animaciones y unos movimientos suaves y fluidos. Cada luchador se siente único, tanto en apariencia como en el carisma que trasmite. Por descontado, entre el elenco disponible, regresan los favoritos de los fans, como Raiden, Scorpion o Sub-Zero.

Los modos de juego no incluyen grandes novedades. Aparte de los tradicionales enfrentamientos en línea y los torneos, regresan por todo lo alto las imprescindibles Torres, una de las modalidades clásicas de la saga. En ella, los usuarios deben ir derrotando contrincantes, para ascender por un edificio con forma de pagoda y poder llegar hasta los rivales de las plantas superiores, que son los más duros y difíciles.

Mortal Kombat 11 se sitúa, por derecho propio, como uno de los referentes en el género de peleas de esta generación. Además de contar con un sistema de combate que funciona con la precisión de un reloj suizo, su apartado técnico lo coloca a la vanguardia de este tipo de títulos. Mención especial para su sobresaliente modo historia: todo un derroche de imaginación, calidad y buen hacer, que los seguidores de la serie disfrutarán de principio a fin.