Fundación Grupo Siro presentó ayer en Madrid, tras dos años de investigación, la primera galleta nutricional enriquecida con vitaminas y minerales. El proyecto nace con la vocación de poder combatir la malnutrición de cualquier grupo poblacional del mundo mayor de tres años, siendo capaz de proveer, por solo 30 céntimos, la energía, los nutrientes y la mayor parte de vitaminas y minerales que necesita una persona para cubrir su aporte diario recomendado.
La presentación tuvo lugar en el el Hospital Universitario HM Sanchinarro y contó con la participación de doctor Juan Abarca Cidón, presidente del grupo HM Hospitales. «Compartimos los valores que impulsan a Fundación Grupo Siro con el desarrollo de esta galleta nutricional. Además, como profesionales de la salud, nos resulta inconcebible que en pleno siglo XXI sigan existiendo malnutrición en el mundo, y esta iniciativa, al aunar innovación, talento y trabajo en equipo, avanza decididamente en la solución de un problema endémico global», explicó.
Por su parte, Juan Manuel González-Serna, presidente de Fundación Grupo Siro, djo que «hemos conseguido desarrollar este producto a un coste muy bajo, y este es el primer paso, pero necesitamos colaborar con otras instituciones, empresas y organizaciones para que puedan hacer llegar la galleta a aquellas poblaciones de todo el mundo que más lo necesitan y estamos tejiendo ya esa red abierta a nuevos socios».
De momento ya colaboran Fundación de Investigación HM Hospitales, Fundación Mapfre, Food For The Poor, Cáritas Arquidiocesana de Guatemala, Digisalud y DHL Supply Chain, entre otros.
proyecto piloto. Para validar la eficacia del consumo de la galleta como suplemento a la alimentación, el manejo de la malnutrición y su impacto positivo en la salud, Fundación Grupo Siro puso en marcha un ensayo clínico en Guatemala, liderado por Fundación de Investigación HM Hospitales, con un grupo de 200 niños de entre 3 y 6 años pertenecientes a la red de Cáritas Arquidiocesana. La elección de este país se debe a que el 49,8% de los niños menores de 5 años sufre desnutrición crónica, es decir, uno de cada dos menores de cinco años, ocupando el primer lugar en América Latina y el cuarto del mundo en desnutrición infantil.