Los grupos municipales del Partido Popular, Ciudadanos y Vox defenderán -y aprobarán- el próximo jueves una moción que pide al Ayuntamiento «que manifieste de forma expresa su respeto a la Constitución y a todas las instituciones del Estado español con lealtad al Rey como jefe del estado», así como a «instar al presidente del Gobierno a romper sus acuerdos con ERC y Bildu».

Asimismo, el Consistorio instará a Pedro Sánchez, recién investido presidente del Gobierno, «a no realizar ninguna concesión a los grupos independentistas que atentan contra la integridad de España, ni a llevar a cabo la creación de una mesa de negociación institucional entre los Gobiernos de España y Cataluña».

Pese a que el nuevo equipo de Gobierno se ha mostrado crítico con la presentación de mociones de ámbitos que excedan lo local, PP, Cs y Vox pedirán también que el Ayuntamiento inste al presidente del Gobierno «a que cumpla su promesa de recuperación del delito de referéndum ilegal», así como que el Ejecutivo de Pedro Sánchez «respete la independencia del poder judicial y no se concedan indultos a las sentencias derivadas del procés de Cataluña».

El sexto punto de la moción apela también a Pedro Sánchez a «respetar los derechos constitucionales claramente amenazados en el debate de investidura, tales como la libertad de expresión, libertad de información y libertad de enseñanza».

Todas estas propuestas, que reúnen el número suficiente de apoyos como para ser aprobadas el próximo jueves, se trasladarán a todos los grupos parlamentarios del Congreso de los Diputados y a la Comisión de Peticiones del Congreso en virtud del artículo 77 de la Constitución.

«humillación». En el argumentario de la moción, los tres partidos llaman la atención sobre las «actuaciones graves y sin precedentes» acaecidas durante las sesiones del debate de investidura, ya que PP, Ciudadanos y Vox entienden que «Pedro Sánchez ha humillado la democracia alcanzando acuerdos con las fuerzas nacionalistas que van en contra de la unidad de España y ha sido incapaz de defender al jefe del Estado, a la democracia y a las víctimas del terrorismo apoyando su investidura en un partido como EH Bildu que no condena el terrorismo de ETA». 

Asimismo, critican que la presidente de la Cámara, Meritxell Batet,  fuese «incapaz de aplicar el artículo 103 del Reglamento del Congreso» cuando se «insultó al jefe del Estado o se despreció a los españoles». Los tres partidos del centroderecha municipal recalcan que «en momentos tan complicados para España como el que actualmente estamos viviendo, es necesario remarcar que la figura del rey Felipe VI es imprescindible».