Campos Barquín asume el «sueño» de dirigir una Comandancia

O. H.
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Lo hace con "humildad y la ilusión de un cadete". El nuevo teniente coronel jefe de la Benemérita destaca la impronta que dejaron sus antecesores y el alto nivel de adiestramiento de sus agentes, a los que reclamó hacer «siempre lo correcto»

Campos Barquín asume el «sueño» de dirigir una Comandancia - Foto: Eva Garrido

El teniente coronel Rafael Campos Barquín juró ayer su cargo como nuevo jefe de la Comandancia de Palencia en un acto castrense en el que manifestó que, tras cuatro años fuera de España, en concreto como agregado de Interior en la embajada española en Venezuela, «este no es un destino más. Es la materialización de un sueño que asumo con humildad pero con la ilusión de un cadete». «Este acto, lejos de ser una mera formalidad, se celebra para afianzar nuestros valores de honor, espíritu de servicio, disciplina, lealtad y compañerismo. De donde vengo (Venezuela), estos valores hace tiempo dejaron de existir en las Fuerzas de Seguridad». Por eso,  afirmó, «como complemento a mi juramento, asumo estos valores con mayor convencimiento si cabe».

Campos Barquín, quinta generación de guardias civiles e hijo del coronel Antonio Campos (ostentó los mandos de las Comandancias de Orense y Almería), indicó que durante 17 años (salvo los cuatro en Caracas), ha sido de todo en una Comandancia: «Desde el niño que jugaba entre los viejos 2 CV hasta jugar en el equipo de baloncesto», junto a otros ahora también tenientes. «He tenido el honor de servir a las órdenes de una decena de jefes de Comandancia. De todos ellos he aprendido muchísimo. Con su        acción de mando y sus consejos se convirtieron en un referente. Hoy al verme en su lugar asumo el difícil reto de ser para todos vosotros lo que ellos fueron para mí», se dirigió a los guardias civiles palentinos en presencia del general de brigada Clemente García Barrios, jefe de la Benemérita en Castilla y León. 

encomienda. Fue el alto mando quien le explicó que recibe una unidad «notablemente aceptada por la sociedad palentina», y le recordó que como máximo responsable del Instituto Armado en la provincia de él «depende la seguridad, libertad y bienestar de los palentinos», con el compromiso de lograr un «nuevo impulso» a la labor de la Guardia Civil, gracias al conocimiento del trabajo territorial, y de las brigadas de Información y Policía Judicial.

El nuevo jefe de la Comandancia, que recibió el guion de la misma del hasta ahora jefe accidental, el recién ascendido a teniente coronel Jesús González, destacó del mes que ha estado ya en Palencia «el alto grado de adiestramiento» de los agentes palentinos, a quienes pidió sacrificio y elegir «siempre el camino correcto, frente a lo fácil y lo cómodo. Hacer lo correcto tiene un precio, pero garantiza la prestación de los mejores servicios», defendió. 

Finalmente, agradeció la impronta dejada en el acuartelamiento por sus antecesores, algunos de ellos presentes, y tuvo especial recuerdo para el anterior titular, el teniente coronel Juan Martínez Ros.