Segundo empate consecutivo del Palencia Cristo Atlético, que no encajó pero tampoco pudo marcar en el Alfonso San Casto de Santa Marta de Tormes, frente a un rival que solo había jugado cuatro encuentros y no conocía la derrota.
El conjunto palentino cuajó una primera mitad algo gris ante un equipo salmantino que supo frenar muy bien su juego ofensivo. En el segundo tiempo, el conjunto dirigido por Rubén Gala mejoró notablemente su juego pero no dispuso prácticamente de oportunidades de gol para poder llevarse los tres puntos en el viaje de regreso a tierras palentinas.
Finalmente, segundo empate para un Palencia Cristo que suma dos encuentros seguidos sin marcar y sin recibir goles.
La primera mitad comenzó con ligero dominio de la posesión por parte del conjunto tormesino. Eso sí, sin generar oportunidades sobre la meta defendida ayer por Guille.
Los palentinos querían construir jugadas desde la defensa pero no podían quebrantar la férrea ordenación defensiva propuesta por parte de los salmantinos. Ante la imposibilidad de crear juego combinativo, los visitantes optaron por cambiar el guion y apostaron por un juego más directo que tampoco funcionó, ya que los envíos no encontraban a un Jesús Torres (la referencia que sitúo Rubén Gala en punta en este encuentro) rodeado de defensores locales.
Mucha intensidad y entrega por parte de los dos equipos en un partido en el que las defensas se estaban imponiendo con solvencia a los ataques. Mucho ritmo pero sin ocasiones destacables en ninguna de las dos porterías. Con este escenario y el 0-0 inicial se llegó al final de la primera mitad.
OCASIÓN MÁS CLARA. El segundo tiempo comenzó con la mejor ocasión del partido hasta el momento, del lado del equipo morado, mediante un disparo potente del mediocentro Viti, que se marchó fuera por muy poco.
El Santa Marta respondió pronto con un disparo de Martiña desde fuera del área que no puso en muchas complicaciones a un bien colocado Guille.
En pocos minutos del segundo tiempo se habían producido más remates a portería que a lo largo de todo el primer acto. Sin embargo, el cambio de dinámica en el encuentro fue un mero espejismo, ya que la sucesión de cambios en unos y otros provocó que el ritmo de juego decayera de nuevo y que ninguno de los dos equipos volviera a generar oportunidades destacables de gol.
El Palencia Cristo Atlético cada vez tenía más posesión de balón ante unos futbolistas salmantinos que ya notaban el cansancio en sus piernas. Pero el electrónico no se movería y el choque finalizaría con un empate absolutamente justo tras lo sucedido sobre el terreno de juego de césped artificial del Alfonso San Casto. de semana.