Gratuitamente y ante la previsión de que siga habiendo un aumento de casos positivos de coronavirus en la región, la Universidad Complutense de Madrid (UCM) ha realizado un llamamiento a sus licenciados y graduados en Biología, Trabajo Social y las diferentes áreas de las ciencias de la salud para ofrecerse como rastreadores voluntarios a la Comunidad.

Una petición que trasladó ayer a través de una carta el propio rector de la UCM, Joaquín Goyache, dirigida a los miembros de la comunidad universitaria, en la que recalca la «disposición a ayudar» de la institución, «tal y como se demostró durante el estado de alarma».

En este punto, explicó que la estimación sobre la situación epidemiológica en el territorio madrileño es que «se siga produciendo un aumento de casos y de contactos de la COVID-19».

Además, Goyache recalcó que los interesados pueden enviar un breve currículum a la Dirección General de Salud Pública, donde se solventarán sus dudas o consultas.

Tras el llamamiento del rector, el mencionado departamento de la Comunidad de Madrid recibió más de 500 currículos procedentes de distintas universidades para trabajar como rastreadores de coronavirus y la Consejería de Sanidad está estudiando las distintas fórmulas de colaboración con los profesionales de entidades externas. En estos momentos, la región cuenta ya con más de 400 personas realizando este trabajo, que son profesionales de la Consejería de Sanidad.

Pero no todos ven con buenos ojos el gesto del rector. La Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (Amyts), por ejemplo, reclamó al Gobierno autonómico que «deje de buscar» rastreadores y que contrate a gente formada en esta materia.

«Lo que necesitamos son profesionales, con contratos dignos, que hagan un trabajo serio con formación y preparación suficiente para hacer seguimiento de los casos de la COVID-19», remarcó.

También CCOO Madrid criticó el llamamiento de Goyache y mostró su rechazo frontal a la oferta de la Complutense, por considerar que la universidad pública «no puede contribuir y animar a la precarización» ni «participar en la devaluación de la figura del rastreador de casos de coronavirus».

«Este programa significa que se está proponiendo a profesionales recién licenciados, que están en este momento en el paro, que trabajen gratis. La universidad pública no se puede prestar a que sus egresados sufran esta falta de reconocimiento y la precariedad, ni tampoco se puede prestar a devaluar de esta manera la figura de los rastreador», manifestó la secretaria general Federación Enseñanza CCOO Madrid, Isabel Galvín.

Ante el enorme revuelo levantado, fuentes de la universidad explicaron que simplemente hicieron de «altavoz» del procedimiento a petición de la administración regional desde la «solidaridad».