Cuatro décadas con los mejores

David del Olmo
-

El Cross Internacional de Venta de Baños figura sexto en el último ranking nacional de la RFEA. La prueba palentina se mantiene en la elite después de 40 años de historia, cumplidos en diciembre

Cuatro décadas con los mejores - Foto: Eva Garrido

El Cross Internacional de Venta de Baños, la histórica prueba palentina de campo a través, celebraba el pasado 15 de diciembre su cuadragésima edición, donde ganaban el ugandés Albert Chemutai y la etíope Zenebu Fikadu y que sirvió para confirmar al evento venteño entre los mejores del calendario nacional un año más.

Así lo anunciaba la Federación Española de Atletismo (RFEA) en su balance  del panorama del cross de cada año por estas fechas, tras la reunión telemática con los organizadores de las pruebas.

RANKING. La clasificación por pruebas de campo a través de la RFEA sitúa como cita con mayor puntuación al burgalés Cross de Atapuerca (5.046,51 puntos),  mientras que en la sexta posición aparece el Cross de Venta de Baños, gracias a los 1.786,54 logrados por su última edición.

Una general en la que los tres primeros clasificados (Atapuerca, Itálica -Sevilla- y Juan Muguerza -Elgoibar-) sumaron menos puntos en 2019 que un año antes. A diferencia de los líderes, los tres siguientes crosses, incluido el palentino, han mejorado. Cuarto es el Cross de la Constitución de Alcobendas  y quinto el de Soria.

El de Venta de Baños, que en 2017 logró 1.694,5 puntos, mejoró en 2018 (1.707,75) y volvía a hacerlo en 2019 (1.786,54), logrando un promedio trianual de 1.729,6, que le mantiene sexto, por delante de Zornotza, Cáceres, Aranda (Constitución) y Yecla (Fiestas de la Virgen), que completan los 10 primeros.

COMIENZOS. La ubicación del cross venteño entre los mejores del país no es una excepción ni ha sido una novedad a lo largo de sus 40 años de existencia.

Porque el evento, que en el año 1980 nació como una competición de campo a través de ámbito reducido (el 21 de diciembre, el I Trofeo de Navidad, contó con la participación de las provincias de Valladolid, Salamanca, Burgos, Logroño, Segovia y Palencia, como figuraba en su cartel oficial). Un año más tarde en su segunda edición (20 de diciembre), ya amplió su categoría, definiéndose como Cross Nacional (acudía el grueso de la selección española júnior -Gerardo Cisneros fue más de dos décadas seleccionador nacional-). En 1982 ya fue el Cross Internacional de Navidad.

Su trayectoria ha sido fruto del duro trabajo, en tiempos muchas veces desfavorables en lo económico para la localidad y sus organizadores (el Ayuntamiento de Venta de Baños), con la meta de seguir presumiendo de cita en la recta final de cada año. Como escribía en 2004 en la revista del XXV aniversario de la prueba el entonces concejal de Deportes del municipio, Miguel Alfambra, en el éxito y supervivencia del cross tienen gran parte de culpa «el magnífico equipo de empleados del Ayuntamiento, el grupo de deportes, el de obras, los funcionarios, los miembros todos de la corporación, que también interviene, aunque nada podría ser sin los patrocinadores y, sobre todo, vosotros, los ventabañenses».

La televisión difundió las excelencias de la prueba para todo el país a partir de 1984 (sus ausencias de última hora en algunas ediciones fueron motivo de zozobra para sus responsables) y la competición anual se aupó a lo más alto del ranking de pruebas españolas de la disciplina. Con su frío, su barro, su viento y los grandes héroes del deporte combatiendo los elementos ante el público que se concentraba en la grada del Polideportivo Municipal de la localidad. Allí podían resguardarse de las inclemencias meteorológicas y ver la salida, las primeras zancadas de los protagonistas y su llegada triunfal por la pista de ceniza que rodea el campo de fútbol).

Dos ilustres palentinos estrenarían el palmarés en 1980: Santiago de la Parte (ya con un dilatado historial de éxitos a sus espaldas, todavía sería olímpico en Los Ángeles 1984 y batiría el récord nacional de maratón el mismo año en Tokio) y Ana Isabel Alonso (aún júnior, tiempo tenía por delante para llenar de brillo su currículum, récord nacional de maratón incluido -aún vigente desde 1995 en San Sebastián-).

El de Amusco ganaría tres veces seguidas, otras tres lo haría la de Villaherreros (en su caso no consecutivas, añadiendo ella otros seis podios). Dieron paso a otros atletas de calado, como Constantino Esparcia, José Luis González, el portugués Domingos Castro(cuatro triunfos), Antonio Serrano, el palentino Isaac Viciosa (dos éxitos seguidos), en un apartado masculino donde en sus primeras dos décadas iban apareciendo esporádicamente los africanos (el etíope Fita Bayesa ganó un año después de su medalla en los JJOOde Barcelona), para dominar en las dos siguientes con mano de hierro (el excelso etíope Kenenisa Bekele, en el XXVcumpleaños, quizá sea el más recordado). Y entre las mujeres, Pilar Fernández (dos triunfos), la aragonesa Montse Abelló (14 veces mundialista en la especialidad), la dos veces campeona del mundo de cross, Helen Kimayo (dos victorias venteñas), Berhane Adere (años después campeona mundial de 10.000) o, más tarde, la venteña de adopción, Marta Domínguez y Alessandra Aguilar, la última atleta capaz de vencer el dominio africano en la prueba, hace ya 10 años. Todos ellos lo hicieron grande.