Un lugar de acceso complicado

O. H.
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Un vehículo de la Guardia Civil desciende con dificultad hacia Casavegas por la pista. - Foto: Óscar Herrero

El autor o autores de la muerte de María Cruz G. deben conocer la zona. Así lo piensan los vecinos de Casavegas, pues reconocen que la pista que une esta pequeña localidad del Municipio de La Pernía con Caloca (50 habitantes) no es apta para novatos. 
Si bien es cierto que es una ruta muy transitada en verano «cuando hay autobuses que llegan aquí para que la gente comience una ruta andando», para nada es recomendable con un coche que no sea un todoterreno, vehículo como el de la víctima y que ha desaparecido tras su fallecimiento en oscuras circunstancias. «Sin un todoterreno es imposible subir por ese camino», explicaba uno de los pocos jóvenes que vive en la localidad. Eso sí, todoterrenos suben muchos por esta pista, puesto que da acceso a los pastos altos de la zona y permite acortar en varios kilómetros la distancia entre las localidades de Cantabria y Palencia.
Pero en este caso, no eran excursionistas los que se encontraron los vecinos de Casavegas. «Cuando llegamos y nos encontramos con un furgón judicial y un montón de agentes, imagínate como nos quedamos. Eso no es normal para un pueblo como éste». Y es ni siquiera hasta allí llega la cobertura de telefonía móvil.