El Cuerpo de la Policía Local de Palencia se compone actualmente de 112 efectivos, distribuidos en tres inspecciones y, cada una de ellas a su vez en las distintas unidades. En el año 2020 tan especial motivó que al Cuerpo se le concediera la Medalla de Oro al Mérito de la Junta de Castilla y León por su labor y solidaridad.
También a los oficiales Mariano Calvo Alonso y Rafa (oficial número 7.079) se les otorgó la Medalla de Plata al Mérito de la Policía Local de la Junta de Castilla y León. Al primero por frustrar un intento autolítico de un ciudadano el 28 de mayo de 2020. Y al segundo por prestar auxilio en un accidente laboral que fue esencial para salvar la vida del accidentado el día 6 de junio.
El oficial Rafa, número 7.079, (prefiere mantenerse en el anonimato por seguridad), de 39 años, es policía local desde enero de 2008, pero en el cuartel de Palencia lleva desde abril de 2017. Está adscrito al servicio de noche y reconoce que le gusta con pasión su trabajo, especialmente cuando su aportación es más que útil, como la que tuvo lugar en una noche del pasado mes de junio, cuando un trabajador de la empresa SEDA Outspam perdió parte de una extremidad en un accidente laboral. Su actuación fue determinante: «Estaba de patrulla cuando me avisaron de que me acercara hasta la empresa. Cuando llegué vi a un chico que se encontraba en el suelo sin un antebrazo porque, tras resbalarse, había metido la extremidad por un ventilador industrial en la caída. La situación era muy complicada, ya que perdía mucha sangre. Lo que hice fue coger mi cinturón y le pude hacer un torniquete a la altura convenida, además de hablarle todo el rato para evitar que perdiera el conocimiento. Me acuerdo de que le hablaba y le hablaba sin parar, además de cogerle los tiempos y el pulso hasta que llegó la ambulancia», relató a Diario Palentino.
OTRA MEDALLA. El oficial, que ya cuenta con otra Medalla de Plata al Mérito por colaborar junto con la Policía Nacional en la detención de un atracador de bancos en Palencia, señaló a este periódico que se sintió «muy bien» por esta actuación, «porque, según me aseguraron después, había sido clave el torniquete que le realice para que no sufriera consecuencias mayores». «Con el tiempo, además, he mantenido contactos con el chico y la verdad es que a partir de aquí se forjó una buena relación», añade.
Apunta que su trabajo es vocacional. «Me gusta mucho. Tengo que señalar que, pese a lo que piense un número indeterminado de personas, nosotros estamos para ayudar, colaborar y aconsejar para que las cosas se hagan bien».
«Me siento muy a gusto, contento y con el trabajo reconocido por los compañeros. Estoy en el turno de noche y puedo decir que se hacen un buen número de intervenciones de ámbito social y humanitario que habitualmente no trascienden. Que no las ve nadie y, por lo tanto, se valora muy poco», recalca.