Las continuas lluvias de los últimos días han afectado de forma importante a la localidad de Saldaña debido a que la Confederación Hidrográfrica del Duero (CHD) ha empezado a desembalsar agua en la zona alta de la cuenca del río Carrión.
De esta forma, como ya ocurrió en años anteriores -donde las lluvias primaverales fueron también generosas- la zona del cámping saldañés fue la primera en inundarse, con el añadido de los daños causados en materiales y trabajos que se están ultimando para poner en funcionamiento el puente anexo de piedra, que se cortó al tráfico tras el derrumbe que se produjo hace tres meses.
«Como el río Carrion, aguas abajo del puente viejo está como está, por falta de limpieza e intervencion en el cauce, la situacón impide que el agua siga su curso, y si se embalsa más arriba es lo que provoca que parte del camping se inunde», tal y como manifestó ayer a DP el alcalde de Saldaña, Adolfo Palacios. «No hay quien entienda a la CHD. El río vino medio seco casi un mes y como no han avisado del desembalse la inundación afectó también a la obra del puente», dijo.
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Daños en la obra del puente de Saldaña por los desembalses
Daños en la obra del puente de Saldaña por los desembalses
Embalses a tope. Las últimas aportaciones de lluvia han hecho que los dos embalses del sistema del Carrión estén -con los datos del pasado 17 de abril- casi llenos. Así, el de Camporredondo, con 70 hectómetros cúbicos, tiene un 93,9 por ciento de agua embalsada, mientras que el pantano contiguo de Canporredondo, con 95 hectómetros, alcanza un 96,1 por ciento. En la cuenca del Pisuerga, el embalse de Aguilar de Campoo alcanza el 94 por ciento de su capacidad total de 247 hectómetros, mientras que los otros dos pequeños pantanos de Requejada y Ruesga están al 89 y 80 por ciento, respectivamente.