El lunes se registró la mínima más baja de agosto en 33 años

A. Rodríguez
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Las cifras del resumen aportado por el observatorio meteorológico de Carralobo (Astudillo) reflejan la recuperación en las precipitaciones

Bancos de niebla sobre la carretera a principios de agosto. - Foto: Eva Garrido

El observatorio meteorológico de Carralobo, en Astudillo, reflejó recientemente, en su resumen de datos recopilados, que la temperatura mínima de agosto, 4 grados, fue la más baja desde 1987. Por otra parte, «las lluvias volvieron a cifras normales, con 20,8 litros por metro cuadrado» detalló Miguel Bustillo, encargado del observatorio meteorológico de Carralobo, tras un 2018 de sequía y un 2019 con escasas precipitaciones. 

Atendiendo a las temperaturas, Bustillo explicó que «este verano, y en particular a lo largo del mes de agosto, no hubieron noches tropicales, en las que el termómetro marca, e incluso sobrepasa, los 20 grados». De esta manera, las mínimas suelen aproximarse a los 22 grados cuando cae el sol generalmente, mientras que el pasado mes rozaron los 17.

En la otra cara de la moneda, «las temperaturas máximas están entre las más altas del mismo período que las más bajas», aseveró el encargado del observatorio meteorológico, al registrarse 37,5 grados el día más caluroso de todo el mes. Así, agosto continuó en la línea de los últimos años, pero alejándose de los valores de 2003,cuando el mercurio subió hasta rozar los 40 grados.

Por otra parte, en cuanto a las precipitaciones, el penúltimo mes de verano registró cifras positivas, que se alejan de los datos de los dos años anteriores, en los que se apenas llovió. De la misma manera, de las cifras de 2011 (58 litros por metro cuadrado), cuando incluso se llegó a ver granizo en pleno estío.

efeméride. Hace 23 años, el penúltimo mes del verano fue uno de los meses más intensos en cuanto a las lluvias, pues el pluviómetro llegó a marcar 92,1 litros por metro cuadrado, según los registros del informe enviado desde el observatorio de Carralobo.

‘En agosto la sandía y el melón un buen refresco son’, dice el refrán. Ya uno se decante por una u otra fruta, ambas son ideales para tomar al sol, que regaló 306,40 horas de luz, nueve menos que el año pasado. Esta cifra cayó más si se compara con la media de los últimos cinco agostos, 335 horas.

De esta manera, con la bajada de las temperaturas (provocadas, en parte por haber menos tiempo de luz) y el aumento de las precipitaciones «no resulta raro -pese a tratarse de un mes de verano- que se hayan registrado tres días de niebla», explicó Bustillo.

Estos días nebulosos comparten espacio en el informe del observatorio meteorológico de Carralobo que registró, del mismo modo, las dos tormentas que tuvieron.