El técnico catalán da la cara tras la dolorosa derrota en Bilbao. Quiere pasar página cuanto antes. 

¿Cómo se encuentran tras el varapalo de Bilbao?

El domingo estábamos jodidos, pero hoy (por ayer) ha salido el sol, vamos a ser positivos. Hay que cambiar un poquito nuestro estado de ánimo y trabajar. Las sensaciones que transmitimos no fueron buenas. Veníamos de hacer una buena semana de entrenamientos, pero llevamos unas semanas atascados en ataque, a los jugadores no les están saliendo las cosas, estamos fallando, sobre todo, en los principios de partido tiros cómodos y nos repercute. Es cierto que en el minuto 15-16 tiramos la toalla y nuestra mentalidad no fue la mejor. Tenemos que ser positivos y recuperar la cabeza porque estamos haciendo muchas cosas bien, pero no las acabamos de concretar. Estoy convencido de que vamos a salir adelante.

¿Cree que el nivel de exigencia es muy alto y puede repercutir en el equipo?

Los jugadores lo tienen, nos hemos tensionado en demasía. Cuando no les salen las cosas tienen un nivel de autocrítica muy grande que hace que no jueguen liberados. Vamos a intentar ayudarlos para que haya liberación y que jueguen como saben. Cuando ha sido así, hemos hechos grandes partidos. Quedan cinco partidos para acabar esta fase y hay que llegar a todos ellos en las mejores condiciones.

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