Villamuriel de Cerrato quiere hacer más llevadera la convivencia entre peatones y vehículos en sus calles, especialmente en las que discurren por el casco histórico, las más transitadas por los turistas que se acercan hasta el pueblo. En este punto, el Ayuntamiento ha reorganizado los estacionamientos ubicados en la calle Mayor, en los que se solo se puede aparcar por un espacio máximo de 20 minutos. Y no siempre, solo dentro del horario permitido de circulación en esta vía, es decir, de lunes a viernes hasta las 20 horas y los sábados solo por la mañana, coincidiendo con el horario comercial.

Es una fórmula que funciona muy bien en el municipio cerrateño. De hecho,  dos parkings de este tipo ya funcionaban desde hace tiempo en esta misma calle, y se han habilitado ahora dos nuevos espacios. «Con esta actuación se pretende facilitar el acceso a los diferentes comercios de la zona de una forma ordenada, fluida y rotatoria», explica el alcalde, Roberto Martín.

La encargada de velar por el cumplimiento de la normativa municipal es la Policía Local, que patrulla la zona para garantizar que no se sobrepasan los 20 minutos de estacionamiento permitido. Para garantizar que se respeten los tiempos, el Consistorio anuncia sanciones de 80 euros para quienes infrinjan la normativa municipal.

En paralelo, se ha realizado una campaña de mejora de la señalización, tanto la horizontal como la vertical, en diferentes puntos del municipio. De esta manera, además de adecentar los indicadores, se han repintado aquellas zonas que así lo precisaban.  

Además de los aparcamientos habilitados en el  centro histórico, el Ayuntamiento ha creado una nueva zona apta para el estacionamiento en Los Olmillos. En este caso, se trata de una solución temporal, debido a la «alta demanda y necesidad de plazas de aparcamiento en el barrio», aseguran desde el equipo de Gobierno. También en Los Olmillos, se ha procedido a sustituir las entradas de garajes que se encontraban deterioradas por unos adoquines más resistentes al paso de los vehículos.

En otro orden de cosas, el municipio ha estrenado señalización turística en los accesos al pueblo, en los que se promociona el Canal de Castilla. Además, en la campaña de renovación de mobiliario urbano, ha mejorado el aspecto de la marquesina de la rotonda de la Urbanización Las Callejas.