Durante el mes de agosto, los vecinos de Villalumbroso han llevado a cabo una campaña de recogida de firmas denunciando las condiciones que presenta el agua que llega a sus hogares. En base a lo observado y que viene sucediendo «desde hace más de 40 años», manifiestan que el agua de la localidad no cumple con el criterio de aceptabilidad. Afirman que su agua presenta «un color marrón lleno de residuos que no invita ni al consumo personal ni a su uso para elaborar comidas o lavar la ropa», según expresan en la solicitud.
Con más de 250 firmas recogidas, requieren que se tomen las medidas oportunas por parte de la Administración para cumplir con el derecho a un agua limpia y aceptable. Natalia Represa, residente en el municipio, se ha sumado a la protesta a causa de las alternativas que se ha visto obligada a tomar ante este problema. «Desde que vivo en Villalumbroso he tenido que pasarme al agua embotellada, pero  no solo para beberla, sino también para cocinar», apunta. Además explica que en muchas ocasiones ha tenido que dejar a sus hijos sin ducharse porque el agua venía «demasiado sucia y con mal olor».

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