La hostelería encara la campaña navideña sin que desde el gobierno autonómico se plantee la implantación del pasaporte Covid ni medidas restrictivas en bares y restaurantes. Por ello, y aupados por los buenos resultados que vienen obteniendo durante la última mitad del año, los hosteleros palentinos tienen unas expectativas «muy buenas y positivas» para las semanas festivas.
Jaime Antolín, presidente de la Asociación General de Hostelería (AGH), colectivo integrado en la patronal CEOE Empresas de Palencia, es optimista, «pero no tanto como para llegar a niveles de 2019, por desgracia. Si facturamos un 80% de aquel año, podemos estar contentísimos». De momento, las reservas para comidas y cenas de empresa, aun con el temor a posibles cancelaciones, «están a niveles muy similares a antes de la pandemia», asegura Antolín. El representante de los hosteleros aclara que, en todo caso, se deja más separación y distancia entre mesas «por responsabilidad de la hostelería. Es decir, funcionamos a menor capacidad, pero mientras estemos llenos...».
Y es que la mayor parte de los restaurantes está prácticamente al completo desde antes del puente, según la AGH. «La gente ha sido muy previsora a la hora de reservar», puntualiza. «Estamos teniendo las empresas de toda la vida y el mismo número de comensales, prácticamente. Parece que se van quitando el miedo», añade.
No tener medidas restrictivas es algo positivo para ellos. «A poca restricción, o con el pasaporte Covid, perderíamos bastante en Navidad. De todas formas, hay que hacerlo todo con un poco de cuidado», reconoce.
El año pasado por estas mismas fechas, las terrazas eran los lugares elegidos en los bares para disfrutar de la Navidad. Sin embargo, «la gente está empezando a perder el miedo y se atreve a hacer una vida casi normal». Y es que, dentro de bares y restaurantes, el trabajo en el interior «se hace casi con normalidad. El año pasado había mucha más gente en las terrazas por el miedo al Covid».
Contratación. A nivel de contratación, habrá una subida «importante, desde luego», debido a esas buenas expectativas para la campaña navideña. «Por lo tanto, necesitaremos trabajadores y espero que muchos», manifiesta el presidente de la AGH.
Asimismo, destaca las dificultades que tienen «siempre» para encontrarlos. «No es de ahora, viene de hace años», añade al tiempo que explica las razones. «Es un oficio devaluado. Cualquiera cree que puede ser camarero en navidades, pero no es así. Mientras este oficio no esté más profesionalizado a nivel estatal, seguiremos igual», reconoce.
El potencial problema de desabastecimiento «no es el que muchos están pintando». Antolín asegura que los proveedores «tienen de todo, se está distribuyendo de forma normal y está llegando a tiempo». Muestra cautela, eso sí, respecto a la huelga de transporte anunciada para los días 20, 21 y 22. «Puede ser un problema. Emplear producto local nos beneficia en ese sentido», concluye.