La bandera de Villamuriel de Cerrato surcó ayer los cielos de la localidad gracias al Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo del Ejército del Aire que protagonizó un descenso de paracaidistas como uno de los actos previos a las fiestas patronales de la localidad.
A mediodía de ayer este escuadrón creado en 1994 y con base en Zaragoza, partió del aeropuerto vallisoletano de Villanubla. Nueve de sus integrantes iban a bordo de un avión que hizo varias pasadas sobre Villamuriel abriendo sus compuertas para dejar caer a dos grupos de paracaidistas.
Caídos del cielo - Foto: Raúl MartÁnezEste es el segundo año que se celebra esta exhibición en la localidad, pero eso no restó participación por parte de los vecinos y también de algunos llegados desde otros puntos de la provincia. Con la vista alzada al cielo, esperaban la llegada de los paracaidistas, mientras en tierra sus compañeros establecían las medidas de seguridad necesarias para que todo saliera bien. Así, junto a las piscinas municipales y gracias a botes de humo delimitaron el espacio en el que sus compañeros debían poner pie en tierra, controlando que el acto se desarrollara según los previsto.
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