Las cuidadoras del CAMP quieren una jornada de 35 horas

Laura Illana
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Varios empleados del Centro de Atención a Minusválidos Psíquicos registraron ayer sus quejas en el Procurador de lo Común para disminuir su horario profesional y mejorar su vida familiar

Las cuidadoras del CAMP quieren una jornada de 35 horas - Foto: Óscar Navarro

Los trabajadores del Centro de Atención a Minusválidos Psíquicos Nuestra Señora de la Calle (Camp) expusieron una queja y entregaron112 firmas, recogidas entre los trabajadores, ante el Procurador de lo Común con una reivindicación principal, «recuperar la jornada de 35 horas laborales a la semana que teníamos en vez de las 37 horas y media que realizamos ahora, pero con las mismas características», señaló una de las cuidadoras Cristina Bajo Calvo. 

 «En septiembre seguiremos trabajando, igualmente, 37 horas y media pero al final del año recuperaremos ese exceso de horas, dos y media más, a través de días libres, pero siempre cuando la administración quiera. Con esta reivindicación queremos que a todos nos traten de la misma forma, sin que nadie, gerentes y administrativos, reciban privilegios», aseguró Bajo Calvo. 

 Según esta cuidadora, muchos de los trabajadores creen, en primer lugar, que adaptar el horario laboral a 35 horas semanales no implica detrimento en la calidad de vida de los usuarios. Además, antes ya tenían un horario laboral similar, en el que los empleados entraban a las 8 de la mañana en vez de a las 7,30 como hacen ahora, y en el horario de tarde salían a las 22 horas en lugar de a las 22,30. 

En segundo lugar, ese incremento de horas laborales afecta a la calidad de trabajo, debido a que a final de año se va a producir un descenso relevante del número de cuidadores  que verán aumentada su carga de trabajo. En tercer lugar, Bajo Calvo destacó lo difícil que resulta la conciliación familiar y laboral de los trabajadores, sobre todo para aquellos que tienen hijos, que se ven obligados a utilizar el programa madrugadores antes iniciar su jornada laboral. «Por todo esto, creemos que las medidas en cuanto a la variación del horario que propone la administración, y que pedimos que se rectifiquen, no mejorarán el servicio que realizaremos», añadió.

Tanto la queja ante el Procurador del Común como el documento que presentarán a la Gerencia de Servicios Sociales, se fundamentan, según Cristina Bajo Calvo, en las últimas informaciones que están recibiendo todos los empleados, aunque no son oficiales, sobre el horario que van a tener a partir de septiembre.