El Club Deportivo Becerril afronta esta tarde, sin que se hayan cumplido ni 48 horas de su compromiso de la Copa del Rey, un nuevo encuentro de la liga en Tercera División, dentro de una decimonovena jornada en la que visitará a las 16 horas los campos de Castañares, para medirse al Burgos Promesas.
Lo hará cansando tras el enorme esfuerzo de sus futbolistas en el choque del jueves en La Balastera ante la Real Sociedad.Pero también dolido, pues molestó y mucho el detalle del club burgalés de situar el partido en sábado en lugar del domingo, aprovechándose de su participación copera. Si los equipos más importantes de Primera División ponen el grito en el cielo cuando la Liga de Campeones y la Liga Santander les ubican sendos partidos con dos días de margen, mucho más condiciona la situación a un conjunto humilde como el palentino. El Burgos Promesas, hoy segundo clasificado, metido de lleno en la lucha por el play-off de ascenso, quizá más pronto que tarde se vea en la necesidad de pedirle un favor al Club Deportivo Becerril.
RECUPERACIÓN. La sesión de trabajo que tenía previsto Edu Narganes en la noche de ayer en el césped del Mariano Haro, se dedicaba a la recuperación, como es lógico.

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