«Esperamos y deseamos que la campaña de prevención de incendios sea positiva y no tengamos problemas. Desde el 1 de julio empieza el riesgo alto y, afortunadamente, del 1 de enero al 31 de mayo ha habido muy pocas incidencias, que a lo largo de 2019 tampoco fueron relevantes. Hay que extremar la prudencia porque en Palencia en un 95% de los incendios hay intervención humana y debe existir colaboración ciudadana a la hora de denunciar estos hechos», tal y como señaló ayer en la presentación el delegado territorial de la Junta, José Antonio Rubio Mielgo.

Para luchar contra el fuego en la provincia de Palencia se dispone de un total de 242 profesionales operativos todo el verano, 15 de ellos ingenieros, 52 agentes medioambientales, 8 celadores, 64 trabajadores fijos y fijos discontinuos, 21 operarios en la unidad helitransportada, 80 integrantes de los tratamientos selvícolas y dos pilotos en la base de Villaeles. En maquinaria, a su vez, se dispone de 8 vehículos autobombas propios y 9 conveniados con ayuntamientos, una unidad helitransportada, un retén de maquinaria y buldócer cortafuegos y para realizar desbroces, un avión y 14 puestos y cámaras de vigilancia situados en torres colocadas en distintos municipios de la provincia. Al respecto, el delegado de la Junta detalló que se cuenta con un operativo permanente, con despliegues estratégicos en todas las provincias de la Comunidad, «es flexible y con una plena coordinación con otras administraciones, lo que garantiza el buen funcionamiento de la  prevención y extinción de incendios forestales», dijo.

El Centro Autonómico de Mando (CAM), ubicado en Valladolid, es el órgano encargado de mantener la coordinación interna de la propia Junta, estando permanentemente en coordinación con la Sala de Emergencias del 112 y con los nueve Centros Provinciales de Mando (CPM) situados en las delegaciones territoriales de las nueve provincias. , está en constante comunicación con el resto de administraciones central, autonómicas y locales.

242 efectivos, 2 medios áereos, 17 autobombas y un buldócer«El jueves ya mantuvimos una reunión con la Subdelegación del Gobierno y Guardia Civil para coordinar todos los medios de los que disponemos y habrá más encuentros con otras administraciones al ser clave para trabajar mejor en la lucha contra los incendios», precisó José Antonio Rubio Mielgo.

adaptarse a la Covid-19. La novedad principal en la campaña anti incendios 2020 se centra en la adaptación de todos los procedimientos y protocolos de centros y medios para que se ejecuten en condiciones de seguridad por parte del personal con motivo de la pandemia del coronavirus, mediante modificaciones en cuanto a la formación del Centro de Defensa del fuego, adaptada a todos los colectivos para impartir vía online.

Además durante el verano, cuando las cuadrillas incrementan el número de componentes, ya está prevista la adecuación de los vehículos para cada equipo, evitando que se solapen los turnos, adaptando los horarios y ubicaciones y  aportando todo el material y equipos de protección individual para la prevención de contagios como las mascarillas, guantes, pantallas y elementos de desinfección. 

Asimismo, el delegado territorial de la Junta aludió a las mejoras tecnológicas, «que contribuyen a optimizar la gestión del incendio y refuerzan la seguridad del operativo disponible», y esta campaña se contará con la instalación de una cámara en el helipuerto de Villaeles para realizar el control operacional de la aeronaves. 

Igualmente, recordó que a partir del 1 de julio los ciudadanos dispondrán de una  nueva APP Incendios sobre el uso del fuego en el monte, «con recomendaciones y prohibiciones, que incorporará avisos de alertas o alarmas sobre cómo está la situación del monte en cada momento y la intención es que la gente colabora al máximo y se actúe con precaución, ya que la lucha por  tratar de minimizar al máximo la aparición de incendios es una tarea de todos».

Además, se procederá a la dotación de nuevos dispositivos smartphone para que todos los agentes medioambientales y celadores tengan su línea personal datos y apps de ayuda, y sea así una de sus herramientas de trabajo diarias, mejorando su seguridad y la realización de tareas. También se han adquirido más equipos de radio y repetidores móviles para dar mejor cobertura de comunicaciones en los incendios.

En lo que va de año se quemaron 2,74 hectáreas forestales 

El número de incendios contabilizados en la provincia de Palencia en lo que va de año, según los datos facilitados ayer y a fecha 31 de mayo, fue de 9 ,de los cuales siete resultaron conatos y la superficie forestal afectada se quedó tan solo en 2,74 hectáreas y 0,12 de ellas se quemaron en zonas arboladas. Por lo que se refiere a 2019 la campaña de incendios concluyó también con datos favorables, ya que hubo 28 incendios y 93 conatos, cuyo resultado fue el de 114 hectáreas de superficie forestal quemada y, de ellas, poco más de 18 estaban arboladas. Igualmente, fueron pasto de las llamas otras 354 hectáreas de suelo agrícola.  Desde el pasado viernes 22 de junio, ante el incremento relevante de temperaturas, se ha declarado peligro medio en las 9 provincias de Castilla y León lo que implica mayor disponibilidad de medios personales de la administración, agentes medioambientales y técnicos de guardia y más disponibilidad de cuadrillas terrestres y helitransportadas. El delegado de la Junta insistió ayer en recomendar a la población que extreme las precauciones y mantenga libre de material combustible el entorno de pueblos, polígonos industriales, urbanizaciones y viviendas aisladas, junto a tareas prevención como ordenación de la superficie forestal todo el año y la limpieza de entornos urbanos, periurbanos y de carreteras.

 «La vegetación es un peligro pero como aún hay mucha humedad puede reducirse»

«Se hacen cortafuegos y se limpian los entornos de pueblos donde hay una mayor vegetación por las lluvias de este año para tratar de evitar riesgos, pero es innegable que a medida que llegue el calor se agostará y siempre es un peligro  que está ahí», según explicó ayer el jefe del Servicio Territorial de Medio Ambiente, José María Martínez Egea.

No obstante, preciso que hay mucha humedad aún en el suelo en buena parte de la provincia, lo que puede resultar positivo en la presente campaña anti incendios. «No se puede aventurar nada, pero si la cosecha se anticipa, se elimina material combustible y al terminar sigue ese cierto grado de humedad en el suelo y surgen rebrotes verdes pudiera ser que no sea un año malo en cuanto a  fuegos. Pero en principio se debe mantener toda la precaución del mundo porque la cantidad de vegetación que se ha acumulado es enorme», puntualizó.

apoyo de la diputación. Además, en materia de prevención, en cuanto a los terrenos no forestales, el delegado de la Junta, José Antonio Rubio Mielgo, precisó que se mantiene la colaboración con la Diputación Provincial, en el marco del denominado Plan de Empleo Forestal, que fue iniciada en 2016, con la finalidad de poder mejorar las condiciones de seguridad de los pueblos y núcleos urbanos al actuar en la limpieza de las zonas periurbanas 

Por lo demás, recordó que durante la época de peligro alto de incendios está prohibido hacer hogueras fuera de los lugares autorizados. En este sentido señaló que es necesario prestar especial atención a las labores de apicultura en días de viento, extremar la precaución en la utilización de herramientas que generan chispas en el medio natural o agrícola, y contar con la máxima atención durante la cosecha del cereal sobre todo los días con altas temperaturas. Igualmente, dijo que  por encima de los 30 grados y vientos superiores a los 30 kilómetros por hora se prohibe cosechar en una franja de 400 metros alrededor del monte.

Recordó la importancia de la prevención, la investigación y la sensibilización ciudadana. «Solo un 6 % de los incendios forestales se debe a causas naturales y en el 95% actúa la mano del hombre y de estos, algo más al 5 % son intencionados. Es preciso incidir en las consecuencias que los incendios tienen en la seguridad de las personas, el valor de los montes, así como las pérdidas que suponen para la población», concluyó.