"Eternamente agradecido y muy emocionado". Así se siente Jorge Sanz tras haber recibido el premio a Mejor Gestor Cultural de Castilla y León, una mención otorgada por GesCulCyL con el objetivo de poner en valor la labor de los profesionales que han contribuido en el desarrollo cultural de nuestra Comunidad Autónoma.

El galardón, por tanto, reconoce la labor del técnico de Cultura en el Ayuntamiento de Aguilar, que a lo largo de los últimos treinta años ha impulsado y consolidado eventos tan importantes como el Festival Internacional de Cortometrajes (FICA), el Encuentro Internacional de Artistas Callejeros (ARCA), el Festival de Artes Escénicas (Aescena) o el Carnaval de la Galleta. 

Sin embargo, tal y como él mismo reconoce, "todo esto hubiera sido imposible sin el apoyo de los vecinos y de las diferentes personas que han formado parte de la Corporación Municipal", de ahí que Sanz entienda el galardón como un reconocimiento "colectivo" al pueblo de Aguilar.

Jorge Sanz, mejor gestor cultural de Castilla y León"Cuando llegué aquí, ni si quiera había presupuesto para Cultura. Ahora, en cambio, a Aguilar se le conoce por algo más que por las galletas y el románico", apunta Sanz, este vallisoletano que hace tres décadas dejó su puesto de trabajo para embarcarse en una nueva aventura en un pequeño pueblo palentino de poco más de 7.000 habitantes.

Así, y aunque la distinción le ha pillado por sorpresa, el técnico asegura que el premio es "un abrazo y un motivo de orgullo", un ejemplo para otros pueblos y la demostración de que "el medio rural también tiene derecho a disfrutar de la Cultura" y a acceder a contenidos que remuevan las conciencias de sus vecinos.

"Para ello, hay que ser perseverantes. No hay atajos en Cultura y en los pueblos es más difícil disponer de presupuesto", continúa Sanz,  que no obstante, reconoce que trabajar en este tipo de núcleos es "muy grato" porque la relación con los vecinos es más cercana, "y eso también lo notan los artistas".

Con respecto a su labor a lo largo de los últimos años, el técnico de Cultura aguilarese cree que lo más bonito ha sido ver cómo el público de la localidad se ha ido haciendo más y más exigente. "Programar para educar", ese es su lema y la máxima que le ha animado a arriesgar, unas veces, y a tener paciencia, otras. "La Cultura no es ocio y entretenimiento. La Cultura tiene que remover las entrañas, es emoción y es pedagogía", apunta Sanz, que considera que cada día existe menos libertad a la hora de elaborar una programación. O lo que es lo mismo, hoy se toman más precauciones para evitar que cualquiera pueda sentirse ofendido. "En los 80 había menos presupuesto, pero también había más ganas de experimentar", indica.

En cualquier caso, para Jorge Sanz este premio es un impulso a su labor y a la de todas las personas que le han acompañado a lo largo de estos años. "Me vienen a la cabeza personas como Jesús María Castro, que siempre me apoyó", explica a la vez que muestra su satisfacción por haber contribuido a "profesionalizar" al público aguilarenses y a generar una masa crítica en el municipio. 

Asimismo, el técnico reconoce la importancia de los Premios GesCulCyl, que también han elegido a Faro Urbano (Valladolid) como proyecto más innovador y a la Fundación Cerezales Antonino y Cinia (León) como entidad más relevante de Castilla y León. "Estas menciones son muy necesarias para visibilizar la profesión y a los profesionales", manifiesta.

Finalmente, Sanz se congratula de que otra iniciativa llevada a cabo en la Montaña Palentina, el proyecto Artistas en Residencia de Cervera, haya quedado finalista en esta convocatoria cuyos premios se dieron a conocer el pasado sábado.