La vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, ha rechazada este lunes la propuesta de Unidas Podemos para crear una empresa pública de energía, ya que a su juicio "la evolución de los precios en los mercados mayoristas no depende de que una empresa sea publica o privada".
En declaraciones a la televisión pública, la también ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital ha defendido que el Gobierno lleva trabajando desde hace tres años en el ámbito de la energía porque la reforma energética y la transición ecológica son una "prioridad" para el Ejecutivo, pero todas las medidas que adopten tienen que ser "eficaces".
"Hay otras ideas y otras sugerencias que están circulando que verdaderamente no van en absoluto a resolver los problemas y la cuestión. Nosotros queremos tomar medidas adecuadas y no tomar atajos que nos lleven a males mayores", ha asegurado la vicepresidenta del Gobierno.
Unidas Podemos, que registró la semana pasada en el Congreso una proposición de ley para crear una empresa pública de energía que aglutine las concesiones hidroeléctricas que se vayan extinguiendo, también ha defendido la necesidad de establecer mecanismos de control para fijar los precios de las energías nuclear e hidráulica.
Sobre esta última cuestión, Calviño, al igual que la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, ha defendido que el Gobierno tiene que moverse siempre "en el ámbito de lo que es legalmente posible y del marco de la regulación europea".
En este sentido, Calviño ha explicado que tanto ella como Ribera han mantenido reuniones con la Comisión Europea para transmitir las prioridades del Gobierno y la importancia de que el marco regulatorio "se adapte a este proceso de transición ecológica".
Respecto a la escalada del precio de la luz en el mercado mayorista, la vicepresidenta primera del Gobierno ha declarado que "todos" eran conscientes de que a medio o largo plazo se encarecerían los mercados mayoristas por los mayores costes de emisión de CO2, pero no de manera tan precipitada en el tiempo.
"Se ha acelerado muchísimo ese aumento, los precios que estamos teniendo los preveíamos para 2030", ha explicado Calviño, que cree que es necesario evitar que esa subida la pague el ciudadano o las empresas, especialmente las pymes.
Pese al alza de los mercados mayoristas, Calviño ha insistido en el objetivo del Gobierno de que la factura eléctrica a finales de este año sea similar a la de 2018, como se comprometió este fin de semana el presidente Pedro Sánchez.
Sobre el comportamiento de algunas compañías energéticas, Calviño ha anunciado que el Gobierno utilizará todos los instrumentos legales para terminar con las malas prácticas de aquellas empresas concesionarias en el ámbito hidroeléctrico, después de que el Gobierno esté investigando el vaciado de determinados embalses.
"Lo que no puede ser es que se haga una gestión inadecuada de unas concesiones públicas que por razones puramente de beneficio de las empresas tengan una consecuencia negativa desde el punto de vista social, medioambiental y suponga una mala gestión de los recursos naturales" ha denunciado Calviño.
Así, el Gobierno ha mostrado su intención de utilizar "inmediatamente" todos los instrumentos legales a su alcance para poner fin a la "mala praxis" de determinadas compañías.