Mañueco asegura que el 10-N no es una "revalida" a la Junta

SPC
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El presidente defiende el esfuerzo de entendimiento de PP y Cs por encima de "colores políticos" y pide a Tudanca que supere su "sufrimiento interno" para hablar de futuro

Mañueco asegura que el 10-N no es una "revalida" a la Junta

El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, afirmó hoy que las elecciones generales del próximo 10 de noviembre no son una “reválida ni un análisis” de la gestión del Gobierno de coalición de PP y Ciudadanos, del que destacó su esfuerzo de entendimiento por encima de “colores políticos” y pidió al socialista Luis Tudanca que supere su “sufrimiento interno” y trabaje por el futuro de la Comunidad.

Fernández Mañueco repasó algunos de los pasos dados en estos primeros cien días de Gobierno de coalición y defendió algunas de las decisiones más cuestionadas, como el plan piloto de la Consejería de Sanidad para la reordenación de la atención primaria en la comarca zamorana de Aliste o sus propuestas para que Javier Maroto fuera senador por la Comunidad e Ignacio Cosidó asesor en la Junta.

“La Junta de Castilla y León no se presenta el 10 de noviembre”, advirtió Fernández Mañueco, aunque reconoció que como presidente del PPCyL sale a ganar y hará campaña a favor de la opción “moderada y centrada” que representa Pablo Casado, un “paisano” de Castilla y León, como una alternativa de cambio.

Durante la entrevista en el programa ‘Conversaciones con’ de Televisión Castilla y León, conducido por el periodista Eduardo Gordaliza, el presidente defendió que hay un “esfuerzo de entendimiento” en el Consejo de Gobierno y que priman los intereses de los ciudadanos por encima de los “colores políticos”.

En ese clima, reconoció que Francisco Igea (Cs) defiende “con intensidad y mucho trabajo” como vicepresidente y portavoz las políticas de la Junta y subrayó que han “encajado”, si bien, cuando se le preguntó por los “charcos” en los que se mete el ‘número dos’ del Ejecutivo, respondió que “es cierto que su forma de ser es distinta” a la suya, pero añadió que “son complementarias” y ambos realizan un “bien trabajo”.

Tras asegurar que no va a haber ninguna fusión obligatoria de municipios en esta legislatura, en modelo en el que difiere con su socio de Cs, Fernández Mañueco respaldó la propuesta de la consejera de Sanidad, Verónica Casado, para mejorar la calidad de la sanidad y su invitación a los partidos a un pacto de comunidad. Por supuesto”, apostilló a la pregunta de sí conocía y apoya el plan piloto de Aliste.

En ese momento, criticó que el PSOE no acudiera a la reunión convocada ayer por Casado -tildó el hecho de falta de cortesía- y afeó que los socialistas se sienten en Navarra con Bildu y no lo hagan en Castilla y León con PP y Cs. “La consejera y yo queremos un proyecto de todos y para todos”, aseveró en relación a trabajar en un pacto de comunidad por la sanidad.

“No ha asumido que es oposición. Tiene un sufrimiento interno que pido que lo supere”, argumentó sobre el socialista Luis Tudanca y su partido tras ganar las elecciones y no gobernar por el pacto de PP y Cs. “En la reunión con Luis Tudanca, que fue cordial, le pedí hablar de futuro, de un pacto por la sanidad, por la ciencia, reclamar al Gobierno medidas por el reto demográfico, ser reivindicativo con el nuevo Gobierno sea del color que sea”, explicó.

En relación al acuerdo de recuperación de las 35 horas para los empleados públicos, reiteró que es una persona de palabra que cumple con sus compromisos, pero insistió en que se debe implantar sin mermar la calidad de los servicios públicos. “El qué está claro, falta el cómo y cuándo, que se tiene que hacer de la mano de los representantes sindicales en la mesa de negociación”, indicó.

“Lo pactado se va a cumplir”, recalcó, tras afirmar que es consciente de que CCOO, UGT y CSIF han convocado una huelga general en la función pública para que se implanten las 35 horas, a la vez que invitó a los representantes del Diálogo Social a que “ayuden a sus compañeros” de la sección de servicios públicos.

El presidente de la Junta criticó que las entregas a cuenta de un modelo de financiación “malo” se realicen “tarde y mal” y subrayó como se les pagará unos 300 millones y se retrasarán los 140 millones de la liquidación del IVA de 2017, que reclamarán para contar con el cien por cien de lo que se debe a la Comunidad. También, aseguró que el próximo año habrá presupuestos, pero indicó que se debe esperar a la formación de un Gobierno que ofrezca estabilidad y certidumbre a empresas, familias y administraciones.