Con más de 30 años en el mundo de la música y una discografía muy amplia, Reincidentes sigue deleitando a su público con música rock y punk. En las letras de sus canciones predominan sus fuertes críticas y opiniones sobre una gran variedad de temas políticos y sociales. 

¿Cómo vivió Reincidentes los meses en casa? 

Igual de mal que todo el mundo. Al principio pensamos que esto iba a ser más corto. Cuando empezamos a volver a ensayar tuvimos que darle la vuelta a todos los proyectos, cancelar algunos, dilatarnos en el tiempo y preocuparnos de dos cosas básicas. La primera era poder llegar a fin de mes porque empezó a ser difícil a partir del quinto mes. 

Y la segunda, ver cómo adaptarnos a las nuevas situaciones, sobre todo, a nivel de los directos. Es más complicado tocar para un público que no está de pie. Por ello decidimos hacer una reinvención del repertorio que íbamos a estrenar justo el día del estado de alarma. De hecho, íbamos a empezar una gira de casi 40 conciertos cuando empeoró la situación sanitaria.

Y ¿cómo se reinventó el grupo?

Decidimos hacer un repertorio acústico para los aforos más limitados y creamos otro formato electroacústico para las actuaciones que tuvieran más gente. El desnudar las canciones ha sido un ejercicio que nos ha dado gusto, pero también llevado mucho trabajo, ya que había que adaptar todo porque somos un grupo de rock, es decir, nuestros conciertos se oyen de pie y la audiencia se aglomera. 

Tuvimos que bajar las revoluciones y texturas sonoras para poder aclimatar al público de lo que transmitimos en el escenario. Queremos seguir estando, tocando y girando  porque para nosotros hacer música es  nuestro trabajo y aspiramos a que el resto de nuestra vida sea rock.

Fueron uno de los grupos que se atrevió y apostó por los conciertos en formato online 

Realizamos un streaming para el Cosquín Rock, un festival argentino, y lo hicimos en Sevilla. La verdad, fue extraño porque era el primer concierto que hacíamos sin apenas público, en la parte central de la audiencia no había gente, sino unas cintas como si fuera la escena de un crimen, y por los lados había personas sentadas en mesas de no más de cuatro personas. A partir de ahí, llegó el verano donde se abrió un poco la cosa y empezamos a hacer conciertos acústicos.  Hubo un contratiempo bastante gordo, porque justo después de esa temporada, Finito dejó la banda. Tuvimos la suerte de suplirlo rápidamente con un amigo guitarrista y cantante, Javi Chispes. Estamos contentos porque Javi nos ha aportado ese punto de ilusión, ya que cuando pasas una pandemia de este tipo, un poco de aire fresco también ayuda.  

Después del festival, sacaron Directo desde la cuarentena, ¿qué tal la experiencia de volver a grabar en directo?

La salida del DVD no estaba contemplada cuando participamos en el festival. El concierto solo se consideró para el streaming, luego Maldito Records y nuestros managers vieron la oportunidad de que el material que había con la cámaras y con el sonido no era malo y se podía sacar algo de ahí. Después del verano, cuando hubo una ola más, surgió la idea de buscar lo que grabamos porque, a lo mejor, lo podíamos agrupar en un nuevo trabajo y hacer un lanzamiento de lo que es Reincidentes en directo. 

¿Cree que las críticas y opiniones que están en las letras de sus canciones han evolucionado durante los años?

Claro. Evoluciona la opinión y la manera de decir las cosas porque uno cambia con el paso del tiempo. Quizás, cuando teníamos 20 años y empezamos con esto, podríamos decir que las letras eran más recias y con menos detalles. Ahora, hablamos de temas parecidos pero lo hacemos con más licencia poética, en unos casos, y en otros con más riqueza, tanto de vocabulario como muchas cosas más que se van adquiriendo con el crecimiento personal. 

¿Qué se va a encontrar el público palentino en el concierto de hoy?

Vamos a hacer un concierto electroacústico. La primera parte será con guitarras acústicas acompañado por batería y bajo. Después, las guitarras acústicas paulatinamente drán paso a la eléctricas. Y, la última parte, se va a parecer mucho a un rock como en cualquier concierto de Reincidentes.  

Será una actuación bastante paulatina y creo que va a estar bastante divertido porque iremos subiendo la intensidad a medida que se desarrolle el concierto. Hay muchas canciones que están reversionadas de cara a conseguir ese sonido electroacústico que hemos ido buscando para coincidir con un publico que está sentado y no se puede poner de pie como lo hacía anteriormente. Quizás bajar las revoluciones en gran parte del concierto es lo más lógico. 

¿Es la primera vez que actúan en Magaz de Pisuerga? ¿Qué esperan de los espectadores?

Sí. Esperamos que no se levanten mucho y que cuiden las medidas de seguridad. Queremos que puedan interiorizar un concierto porque, aunque somos totalmente conscientes de que esta es una banda que toca para que la gente grite, baile, bote, será una actuación muy diferente. La actitud y las letras son las mismas, pero el formato será distinto. En unos años, quien nos haya visto en este momento dirá que vio una versión de Reincidentes que no volveremos usar porque es algo que inventamos solo para la pandemia.