La primera vez para 3.391 jóvenes

Carlos H. Sanz
-

El 28-A tienen la posibilidad de estrenarse más de tres mil electores que han cumplido 18 años desde la última cita electoral

La primera vez para 3.391 jóvenes

La cita con las urnas siempre tiene algo de especial. Por muchas veces que un ciudadano haya depositado su voto, siempre siente un escalofrío de responsabilidad y compromiso con la democracia. Pero si para alguien será especial la próxima cita del 28 de abril, será para los 3.391 electores que tendrán la posibilidad de estrenarse y participar en el proceso electoral.

Ese es el número de ciudadanos residentes que ha cumplido los 18 años desde la última cita electoral, la de junio de 2016, los electores más jóvenes de esta cita electoral cuyo voto valdrá igual que el más veterano de todos ellos.

El número asciende a 4.705 si se tiene en cuenta la anterior cita electoral, la de las elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2015, y son 6.013 si se compara el número de electores de las europeas del año anterior.

Según los datos del censo, en la provincia hay 2.406 jóvenes de 18 o 19 años llamados a las urnas, y 6.296 entre 20 y 24. Un dato curioso es que hay más electores de 85 o más años (9.316).

en primera persona. Uno de esos jóvenes que acudirá por vez primera a las urnas es Diego Abad, un guardense de 19 años de edad residente en Valladolid, donde cursa sus estudios de Imagen para el diagnóstico y medicina nuclear en el colegio Rafaela María. Está citado a votar en las aulas del que fuera su colegio durante nueve años, El Otero, al que regresará para ejercer su derecho en las urnas con la idea de que su voto «sirva para que el país vaya mejor y haya un futuro más próspero para todos los españoles».

Un derecho al que el joven se enfrenta «con entusiasmo», pues sabe que votará en una provincia en el que los jóvenes como él son minoría. «Por primera vez, nuestra palabra va a ser tenida en cuenta y eso es una gran responsabilidad», afirma este joven elector natural de Guardo. 

Y es que reconoce que, pese a tener las ideas «bastante claras», la diversidad de partidos que optan a tener representación en el Congreso y el Senado, «a veces nos pone las cosas difíciles a los jóvenes para acercarnos a un partido concreto, porque todavía les cuesta bastante conectar con nosotros». Una opinión que, asegura, comparte su grupo de amigos.

Jóvenes que siguen al día la información política «a través de los medios de comunicación y las redes sociales» y que, como Diego, esperan que su voto «sirva para poder cambiar a mejor».

Para Diego y para el resto de los 3.390 jóvenes que el domingo día 28 podrán ejercer su derecho al voto será una jornada que no olvidarán nunca, el día en el que por primera vez se tendrá en cuenta su opinión a la hora de elegir a quienes dirigirán el futuro del país durante los próximos cuatro años.