El favorito, de superior categoría, se alzó con el título copero en el pabellón de Palencia. El San Pablo Burgos, a punto de iniciar su liga, demostró su superioridad ante un Valladolid que la víspera debió jugar un duro encuentro de semifinales (que celebró como si del título se tratara) y tampoco desgastó a sus hombres importantes en una empresa inútil. Tras el 18-15 del primer periodo, los de Epi tomaron el mando y poco a poco fueron incrementando su diferencia hasta los 20 puntos del 64-84.