Algunas personas utilizan venenos ilegales para acabar con animales que se alimentan de las especies que cazan o que pueden suponer una amenaza para su ganado, pero el método es ilegal y no selectivo. Su uso provoca muertes indiscriminadas en la fauna, sobre todo de aves en peligro de extinción. Según el último informe sobre la situación del veneno en España de 2020 de WWF y SEO/BirdLife, solo entre los años 1992 y 2017, se cometieron más de 9.700 de estos delitos contra la fauna, con un resultado de más de 21.260 animales muertos por consumo de cebos envenenados. Una elevada cifra muy inferior a la real, que podría superar los 200.000 ejemplares, puesto que se estima que solo se detectan entre el 10 y el 15% de los casos. 

En el período señalado, en Palencia se confirmó la muerte de 292 animales, la mayoría de ellos milanos reales, pero también alimoches, perros, lobos y buitres, entre otras especies. Tal y como se desprende de los datos, la provincia ocupa el puesto 18 en el ranking nacional, y a nivel regional se sitúa solo por detrás de Valladolid (588), Burgos (470) y Segovia (408). 

Por comunidades autónomas, Andalucía es la región que más casos de muertes de este tipo detectó, 2.484, seguida de Castilla y León, con 2.056, y Castilla-La Mancha, donde se pudo confirmar el envenenamiento de 1.368 ejemplares. Las cifras demuestran que, aunque el uso de este tipo de productos está totalmente prohibido desde hace años, hay muchas personas que siguen utilizándolos. 

Al menos 292 animales han muerto por veneno en 25 añosPor suerte, las nuevas tecnologías con las que se equipa a las aves para hacer seguimientos y tratar de asegurar su conservación, convierte a estos animales en auténticos centinelas del veneno. Dichos sistemas han incrementado su efectividad exponencialmente en los últimos dos años, lo que sumado al número de aves marcadas, ha hecho que se esté produciendo una mejora en la detección de estos delitos.

Dar visibilidad a este tema es el objetivo de la campaña Centinelas del Veneno, en la que participa la bióloga palentina Blanca Berzosa. «Nuestra finalidad con esta iniciativa es dar a conocer la importancia de los GPS  y disminuir la sensación de impunidad entre quienes cometen estos atentados contra la fauna», explica la trabajadora de WWF. Y es que, la tecnología ha avanzado tanto que hoy en día se puede saber hasta la causa de la muerte según como haya caído el animal y la velocidad de esa caída. Además, estos datos constituyen pruebas periciales en un juicio.

«Castilla y León es una de las comunidades autónomas con mayor incidencia de veneno y la mayoría de nuestros centinelas patrullará por aquí», indica Blanca Berzosa al tiempo que explica que «las seis aves que encabezan la campaña representan a los miles marcados por toda España». 

Al menos 292 animales han muerto por veneno en 25 años«Hasta los años 70 estuvo vigente en España la Ley de Alimañas. Con su eliminación, los venenos se fueron prohibiendo, pero aún queda mucho stock y también se han introducido otro tipo de sustancias», continúa. Así, los grupos de animales más afectados por este tipo de prácticas son las rapaces (35%), los mamíferos domésticos (21%) y los carnívoros terrestres (9%) como el lobo o el zorro. En cuanto a los tipos de veneno, el más utilizado en España es el carbamato aldicarb, prohibido desde 2007, y que aparece en el 40% de los episodios registrados. Le siguen el carbofurano (24% de casos), prohibido desde 2008, y la estricnina (5%), prohibida desde 1994.

«La pena depende del delito, es decir, de la sustancia utilizada y del impacto que haya tenido», explica Blanca Berzosa, al tiempo que recuerda la importancia de la colaboración entre instituciones en la lucha contra esta lacra. «Para mejorar la persecución de estos delitos es fundamental la formación de expertos y la coordinación entre fiscales, jueces, agentes medioambientales, comunidades autónomas y organismos ecologistas, entre otros», apunta. 

En este sentido, la bióloga destaca la labor realizada en Andalucía, «ejemplo a nivel europeo». Castilla y León, por el contrario, se sitúa a la cola en cuanto a resolución de sanciones, formación de agentes y número de unidades caninas, por lo que anima a los organismos competentes a tomar cartas en el asunto y a enfrentar con firmeza la lucha contra el envenenamiento de la fauna.

Proyecto Life Swipe: Centinelas del Veneno. La campaña Centinelas del Veneno es una acción innovadora de comunicación sobre la utilidad del marcaje de aves con emisores GPS para la detección y respuesta rápida en caso de incidencias, de gran interés en la lucha contra los delitos ambientales como el uso del veneno, una herramienta que ha demostrado ser especialmente importante en España. La iniciativa ha sido seleccionada por WWF España como una de las acciones demostrativas que forman parte del proyecto europeo Life Swipe (Persecución exitosa de los Delitos contra la Biodiversidad en Europa, por sus siglas en inglés). 

La iniciativa potenciará el trabajo en la reducción del crimen ambiental en Europa y tiene como objetivo la disminución de este tipo de delitos gracias al aumento del número de casos detectados, enjuiciados y condenados penalmente mediante una mejor coordinación, formación y cooperación transfronteriza entre 11 países europeos.

Cada vez son más las organizaciones y entidades investigadoras que trabajan siguiendo a estos y otros muchos centinelas para fines de conservación, pero también para aprovechar esta misión de vigías. Por citar algunos ejemplos, solo Grefa, entidad que colabora en el marcaje y seguimiento de los centinelas de WWF, tiene marcadas casi 800 aves, y el Ministerio para la Transición Ecológica ha facilitado el marcaje de más de 2.000 aves en los últimos años.

La página web del proyecto (centinelasdelveneno.wwf.es) incluye todos los detalles del mismo, los últimos informes sobre el veneno en España y también información muy útil sobre qué hacer si encontramos un animal envenenado en el campo o qué debemos saber sobre este tipo de sustancias ilegales. 

Si quieres ver el vídeo del marcaje con GPS de un milano pincha aquí