Dice el refrán que a perro flaco todo son pulgas. Pulgas no, pero virus sí. Varios de los componentes de la plantilla del Becerril se han visto afectado por una fuerte gripe, que les ha impedido poder entrenar en condiciones para preparar el ya de por sí complicadísimo partido en Astorga, ante uno de los claros aspirantes no sólo al play-off, sino al ascenso a Segunda B.

Diego Martín, Kike, Kuko y Diestro han sufrido un fuerte proceso gripal, del que no están totalmente recuperados, pero con la salvedad del primero (que no ha entrenado ni un día en toda la semana) viajarán a tierras maragatas, aunque todavía débiles. El capitán, después de su lesión en la rodilla que le impidiese jugar el partido de Copa ante la Real, ya está en disposición de poder tener unos minutos, siempre y cuando su gripe remita. Baja segura también es Rubén Sierra, por cinco cartulinas amarillas. Por lo tanto, los 18 de la convocatoria ya están fijos, aunque alguno podría caerse finalmente si sigue con fiebre. 

Desde el club morado no se llegó a plantear pedir el aplazamiento del partido. «Iremos con lo que tengamos, los que no estén al cien por cien harán un nuevo sacrificio. Tiraremos para adelante con lo que tengamos», manifiesta EduNarganes, el técnico morado.

El rival es de identidad, especialmente en su terreno de juego. «Este equipo está diseñado para meterse en el play-off. Tienen jugadores de mucha calidad y veteranía, jugadores muy buenos. Han fichado ahora a un portero cedido del Celta que es magnífico, de los que da puntos. Es un partido complicado, no nos vamos a engañar, pero hemos visto vídeos de ellos en La Eragudina y ha habido equipos que han hecho el partido largo y se han acabado llevando puntos. ¿Por qué no podemos hacerlo nosotros también?», se pregunta.

De hecho, en el partido de ida, los palentinos llegaron a ponerse por delante en el marcador, pero la salida de Amor y Puente lo cambió todo, recibiendo tres goles en quince minutos. «Es un lujo que pocos equipos se pueden permitir, tener a jugadores de esta entidad en el banquillo. Lo hicieron contra nosotros, pero también en otros partidos. Luego salen en la segunda parte, cuando el rival está desgastado, y te hacen un destrozo. El Astorga tiene un gran fondo de armario, 17-18 jugadores de entidad».

La cuesta de enero lo es más para el Becerril, más bien la subida al Everest. Comenzó con una derrota en León ante el filial de la Cultural, continuó con la jornada de descanso para los morados al ser grupo impar y ahora llegan Astorga, Ávila, Numancia B y Zamora. En la ida, perdió ante todos estos poderosos rivales, llegando su primer punto con el empate casero ante el Mirandés B. «Somos un equipo mejor que al comienzo de la liga, hemos dado un paso hace adelante. De ninguna forma se tiene que repetir. Hay que sacar puntos como sea y donde sea».