Isco y Asensio reclaman su sitio

SPC
-

El Real Madrid se da un festín ante el Melilla para estar en el bombo de la siguiente ronda con el liderazgo de los dos internacionales españoles (6-1)

Isco y Asensio reclaman su sitio - Foto: Rodrigo Jimenez

El Real Madrid disfrutó ayer de una plácida tarde en el Santiago Bernabéu con una goleada (6-1) ante el Melilla, liderada por Isco y Asensio -con dos tanto cada uno- para reivindicar su situación y resolver el pase a los octavos de final de la Copa del Rey, el cual ya estaba más que encarrilado tras el 0-4 de la ida. 

  El partido fue un patio de recreo para los dos internacionales españoles. El malagueño se gustó con dos golazos desde fuera del área y el balear marcó otros dos y regaló el tercero al canterano Javi Sánchez. Todo eran mensajes para un Solari que vio desde la banda la proclama de dos de sus jugadores con más talento, pero que no están contanto en su esquema de juego.

  Media hora tardó el campeón de Europa en abrir la cuenta y hacer las delicias de los más de 55.000 espectadores que se dieron cita en Chamartín. Asensio volvió a encontrarse a sí mismo y se encargó de ser protagonista en los tres goles blancos del primer tiempo. Primero, marcó en el minuto 33, tras finalizar una gran jugada individual; después, repitió en el 35, después de aprovechar una asistencia de Vinícius; y, finalmente, dio un gran pase a Javi Sánchez para que el canterano firmara el tercero.

En seis minutos cualquier conato de reacción había quedado suspendido para el cuadro de Luis Miguel Carrión, que pelea por ascender a Segunda y ya se puede olvidar de caramelos como el que saboreó con esta eliminatoria. 

Varita mágica. El 3-0 relajó aún más al bloque merengue, que saltó a jugar en la segunda parte más tranquilo si cabe. Isco sacó entonces la varita mágica y pidió que le apuntasen los focos. El del Arroyo de la Miel marcó dos goles de bandera. Entre medias, también fue el turno de Vinícius, que se besó el escudo al meter el quinto de la tarde en una acción personal con algo de fortuna, después de haberlo  lo intentado sin puntería en multitud de ocasiones durante el choque.

  El Melilla, por su parte, no se quiso ir de la capital de España sin hacerle un gol al actual campeón del Viejo Continente. El honor lo tuvo Yacine, que fusiló a Keylor Navas desde los 11 metros.