Marco Antonio Martínez, reelegido secretario regional de USO

SPC
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El sindicato acordó trasladar su sede regional desde Valladolid a Burgos

Marco Antonio Martínez, reelegido secretario regional de USO - Foto: DAVID ARRANZ

El exminero de la Hullera Vasco-Leonesa Marco Antonio Martínez fue reelegido hoy con el cien por cien de los votos como secretario general de USO-Castilla y León en el 8º Congreso Regional, celebrado en la ciudad de Salamanca. Martínez afronta su segundo mandato al frente la Unión Regional, tras una dilatada carrera sindical como delegado en la Vasco y como dirigente en las diferentes estructuras de USO.

El secretario general estará acompañado por una Comisión Ejecutiva formada por Lorenzo Lasa como secretario de Organización y Finanzas; María Jesús Sutil como secretaria de Igualdad, y Berta Pérez Laguna y Federico Laguna, como secretarios de Comunicación. La Secretaría de Acción Sindical se divide por zonas: Roberto Alonso se encargará de la Zona Este; Ismael Ruiz de Zona Centro; y Antonio Nicolás, del Oeste.

Uno de los cambios más importantes adoptado en los nuevos Estatutos es el cambio de la sede regional de Valladolid a Burgos, algo que desde la organización achacan a dos motivos, “uno funcional y otro sentimental”. “La mayoría de nuestra estructura técnica y administrativa se encuentra allí, por lo que es cómodo trasladar oficialmente la sede. Pero, además, Burgos es, dentro de nuestra comunidad autónoma, donde encontramos las raíces más antiguas de la USO”, explicó Martínez.

En su intervención, anunció que Burgos ha sido la ciudad elegida por la Confederación para albergar los actos centrales del 1 de Mayo: “Nos parecía un colofón para el Congreso y un gran estreno para ese cambio de sede”, explicó.

El Congreso aprobóuna resolución especial en favor de la lucha, desde el sindicalismo, por revertir los efectos de “la España vaciada”. “En Castilla y León tenemos la región más vasta de Europa, con poca población, dispersa y envejecida. Estamos padeciendo los efectos de la reconversión energética, que ha sido un zarpazo, no una transición justa; pero también el empobrecimiento del campo y la industria agrolimentaria. Nos hemos convertido en una región de servicios sin que se den los mimbres para ello.