45 médicos, el 13,12%, secundaron ayer el paro convocado hoy en los centros sanitarios por el sindicato CESM. Se trata del segundo mayor porcentaje de seguimiento en la Comunidad, por detás de Zamora (28,61 por ciento, 117). En Ávila fue del 7,98% (19 médicos respaldaron el paro); en Burgos del 5,47% (56); en León del 12,36% (130); en Salamanca del 13,05% (154); en Segovia 5,47% (17); en Soria del 12,17% (28) y en Valladolid del 6,68% (113).
El paro convocado en los centros sanitarios por CESM tuvo un seguimiento medio del 10,44 %, según los datos registrados por la Gerencia Regional de Salud en las once áreas de salud de la Comunidad, la Gerencia de Emergencias y el Centro Regional de Medicina Deportiva a lo largo del turno de mañana.
CESM convoca la huelga nacional indefinida, que comenzó ayer mediante paros diarios los últimos martes de cada mes, mientras no se obtenga respuesta de la Administración. Exige la inmediata retirada del Real Decreto Ley 29/2020 y el inicio de las negociaciones para solucionar la grave situación de abandono que sufren los profesionales, cuyas condiciones de trabajo están en todos los problemas del Sistema Nacional de Salud.
«Nuestra magnífica sanidad se ha venido visto lastrada por una década de recortes y falta de inversión que nos ha venido alejando de la sanidad de los países de nuestro entorno europeo», afirma CESM, que añade que «esto se ha traducido en los profesionales en una disminución de las plantillas con la consiguiente sobrecarga laboral que ha llegado a ser insostenible, y en el resto de los españoles y, en especial los pacientes que se han visto con listas de espera para casi todas las actividades del sistema sanitario, que además iban en aumento, y la calidad de la atención que recibían iba disminuyendo».
CESM situó el seguimiento de la huelga en los hospitales de Castilla y León en el 65%, un porcentaje inferior en Atención Primaria debido a la «sobresaturación» de este nivel asistencial, según indicó el vicesecretario autonómico de la central sindical, José María Soto, quien acusó a la Junta de «entorpecer» el paro.