4 de cada 10 castellanos y leoneses tiene seguro de decesos

SPC
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Ávila es la segunda provincia española con más pólizas por habitante, alcanzando una penetración del 84 por ciento, mientras que Soria se sitúa a la cola con el 19 por ciento

Cuatro de cada diez castellanos y leoneses tiene contratado un seguro de decesos. El pasado año las compañías de seguro contabilizaban un total de 1.003.224 asegurados, un 0,59 por ciento más que en 2016, según se desprenden del Informe Estamos Seguros 2017 elaborado por la Asociación Empresarial del Seguro (Unespa), en el que se pone de manifiesto que el 46,3 por ciento de los españoles cuenta con una póliza de este tipo, porcentaje que en Castilla y León baja al 41,1 por ciento.

Sin duda, el seguro de decesos es uno de los más antiguos y valorados en nuestra sociedad, ya que el miedo a la muerte, un sentimiento innato en todos los seres humanos, hace que la preparación de nuestro propio sepelio sea algo difícil de afrontar. Desde las propias aseguradoras se resaltan que aunque en principio la mayoría de las personas son reticentes a plantearse la contratación de un seguro de este tipo en vida, cuando se ha tenido que afrontar el fallecimiento de una persona cercana es cuando se valora la utilidad de este servicio.

No obstante, en el informe de Unespa, la llama la atención las diferencias que existen entre provincias, y mientras en Ávila el índice de penetración de los seguros de deceso alcanza el 84 por ciento y están formalizadas más de 124.000 pólizas, en Soria, con poco más de 16.000, este índice cae al 19 por ciento, el más bajo de toda España.

Después de Ávila, que a nivel nacional sólo es superada por Cádiz, donde el 86 por ciento de la población está asegurada, se encuentra Salamanca, con un 56 por ciento (175.033 pólizas), León, con un 52 por ciento (224.120) y Segovia, con un 48 por ciento (69.270). En Palencia, con 52.547 seguros de decesos, y en Zamora, con 58.191, el porcentaje alcanza el 35 por ciento, tres puntos por debajo de Valladolid (182.702), mientras que en Burgos se sitúa en el 31 por ciento (100.507).

Con relación al año 2016, el número de pólizas sube en todas la provincias a excepción de Ávila, donde cayeron un 0,30 por ciento. Los mayores incrementos se experimentaron en Soria, con un 2,20 por ciento, y Palencia con un 1,42 por ciento. En el conjunto de España el crecimiento fue del 1,43 por ciento y se suscribieron casi 260.000 pólizas nuevas. Esta subida está en línea con la evolución positiva que vienen registrado el sector con ligeros incrementos en los últimos cinco años. A nivel nacional, el pasado año, el sector se hizo cargo del entierro de 255.934 personas. Es decir, el 60 por ciento de los fallecidos en el país. La mayoría de las inhumaciones (187.477) se produjo en la misma localidad donde ocurrió el fallecimiento y en 67.941 casos, un 27 por ciento del total, fue preciso trasladar el cadáver de una población a otra dentro del territorio nacional. Asimismo, hubo 516 personas que perecieron en el extranjero.

mitad sur. La implantación del seguro de decesos es particularmente destacada en la mitad sur y en la cornisa cantábrica. La implantación del seguro de decesos es particularmente destacada en Extremadura, donde el 70 por ciento de la población se encuentra cubierta. Le siguen por relevancia Asturias (63,7 por ciento) y Andalucía (60,9 por ciento).

Las provincias donde este producto tiene una mayor presencia son Cádiz (86 por ciento), Ávila (84 por ciento), Badajoz (78 por ciento), Ciudad Real (73 por ciento) y Huelva (72 por ciento). Pero incluso en aquellos territorios donde el seguro de decesos tiene un peso comparativamente bajo, su presencia sigue siendo más que perceptible. Es el caso de Melilla (18 por ciento), Soria (19 por ciento), Huesca (22 por ciento), Teruel (23 por ciento) y Baleares (24 por ciento).

Los índices de suscripción más altos de este producto se dan pasados los 40 años y, muy especialmente, en la vejez. No obstante, el seguro de decesos también está bastante presente entre los niños y la gente joven. Las tasas de aseguramiento entre los grupos de población menores de 30 años oscilan entre el 27 y el 44 por ciento, según Unespa.