Cuando la política se hace desde casa

SPC
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Los grupos de las Cortes mantienen su iniciativa aunque afirman que lo prioritario es superar la emergencia sanitaria del coronavirus

Las Cortes de Castilla y León suspendieron su actividad parlamentaria e institucional de manera temporal el pasado 13 de marzo, cuando ya el coronavirus había iniciado su expansión. Los políticos trabajan desde sus domicilios, pues al igual que el resto de los ciudadanos tienen que guardar la cuarentena. El teléfono y los medios telemáticos suplen la cercanía. Se aprovecha este tiempo desconocido para preparar iniciativas, aunque la prioridad está en superar la emergencia sanitaria tanto en la Comunidad como en España.

Todos los procuradores disponen de un portátil entregado por las Cortes, aunque la conexión corre a su cargo. En el aparato, cuentan con los elementos, acceso a directorios en ‘Nube’, correo de la institución (y el particular si lo han pedido), además de entrada vía web a los boletines, diarios y vídeos de los plenos. Lo necesario para trabajar desde casa e interactuar entre ellos.

En este nuevo escenario, cuando ahora la normalidad llevaría a un periodo intenso de actividad parlamentaria y a la espera de proyectos de ley de la Junta y de la entrada de los presupuestos, que fueron anunciados para primeros de abril, el portavoz popular, Raúl de la Hoz; la viceportavoz socialista, Virginia Barcones, y el portavoz adjunto de Cs, David Castaño, explican a Ical en qué trabajan y como se coordinan con sus compañeros de bancadas.

Seguimiento de la evolución del coronavirus en Castilla y León, análisis de lo que se hace en otras comunidades con la posibilidad de implementar medidas por la Junta centran el trabajo del Grupo Popular y de su portavoz, quien afirma que se adelanta en propuestas pero se ha decidido no presentarlas porque, aunque está abierto el Registro, no se califican por la Mesa. Otras líneas en esta formación se sustentan en un balance de los acuerdos de la Cámara y de los pactos con su socio de Cs.

«Mucho teléfono», afirma Virginia Barcones, en su doble función de coordinadora del grupo mayoritario y con los alcaldes y concejales socialistas, como responsable de políticas municipales. Surgen dudas, se comparten experiencias, documentos, se generan propuestas que ayuden a superar esta crisis, pero siempre desde la «lealtad» con la Junta, ya que ese, como explica a Ical, fue el «patrón» marcado por el PSOE de Castilla y León y su líder Luis Tudanca.

Lo mismo en el Grupo de Ciudadanos: coordinación entre los procuradores y con sus cargos públicos, dice David Castaño, quien lamenta que se haya perdido el «contacto humano», «palpar» y reuniones con colectivos para canalizar información a la Junta ante «el aluvión de peticiones» desde la sociedad civil. «No paramos, enganchado al teléfono», apostilla.

La suspensión de la actividad afecta a las tres comisiones de investigación creadas y que arrancaron a finales e inicio de año, como son la de las eólicas, plan de medios y fondos mineros. En cartera, hay dos proyectos de ley, el de supresión del 99 por ciento del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, que se iba a aprobar en el segundo pleno de marzo suspendido, y el de la declaración del parque natural de los sabinares del Arlanza-La Yecla (Burgos). No hay iniciativas que requieran solicitar prórrogas.

Presupuestos

Las Cortes aprobaron el límite de gasto, paso previo a la presentación de los presupuestos, pero tanto De la Hoz como Castaño creen que se tendrá que adaptar al nuevo escenario de más gastos en sanidad y servicios sociales por la crisis del coronavirus y menos ingresos ante la paralización de la actividad empresarial e industrial. Al portavoz popular no le cabe duda que ese desfase será un «lastre» y dejará secuelas económicas y sociales que van a condicionar una parte de la legislatura.

Más allá va el portavoz adjunto naranja que entiende que el techo de gasto actual «no sirve» y se deberá centrar el trabajo y priorizar en los colectivos más débiles y desfavorecidos, a la vez que confía en unos nuevos presupuestos que cuenten con el apoyo de todos los grupos. «Hay que trabajar mucho y muy duro», afirma, mientras que se refiere a las pérdidas de sectores como el turístico o el ganadero con corderos que no llegan a restaurantes cerrados.

Castilla y León es un «ejemplo» en el comportamiento de PP y PSOE con el Gobierno y con la Junta de Castilla y León para salir de la emergencia sanitaria y social causada por la pandemia, coinciden De la Hoz y Barcones. «Lealtad del PP con el Gobierno y del PSOE con la Junta», dice el primero, que expresa su deseo de que, superada esta crisis, los socialistas vuelvan a una oposición «constructiva» en interés de la Comunidad.

Barcones subraya el objetivo marcado por su partido desde el principio de ser útiles y leales con la Junta y valora la interlocución entre Alfonso Fernández Mañueco y Luis Tudanca, a la que públicamente se han referido ambos. «Lealtad, arrimar el hombro, disposición absoluta y poner encima de la mesa ideas que puedan ayudar», resume.

Lo primero, coinciden los tres, es superar esta dramática situación que cada día eleva el número de afectados y de muertos, para después centrase en los más perjudicados por la parálisis, aunque también Gobierno y Junta han puesto medidas y recursos para minimizar daños en personas, familias y empresas.

«No se ve la luz, pero se verá», afirma David Castaño. «No es el momento de otra cosa que el de poner soluciones», remata Barcones. Pero la vuelta a la normalidad será, en todo caso y como ocurre en países que están superando el virus, paulatina.