Son los únicos que, en plena cuarentena por la lucha contra el coronavirus, tienen permiso para salir a la calle. Los perros, inseparables animales de compañía, están muy presentes en la vida diaria de la ciudad, tanto como que hay uno por cada 11 palentinos, si se tiene en cuenta a los que están censados. Al cierre del pasado año, en el municipio había un total de 6.762 canes censados por la Policía Local, que es la que tiene encomendada el control del padrón de estos animales de compañía. Su número se ha incrementado un 3,14 por ciento respecto al año anterior, ya que entonces el registro contabilizaba 6.556.
De hecho, solo durante el 2019, la Policía Local anotó 206 canes nuevos en el censo de la ciudad, frente a las 85 bajas que se produjeron a lo largo del año. Si se compara con el año anterior, el número de altas es menor (225 en 2018) pero también se produjeron menos bajas (65). De esos 6.762 perros censados, 196 son de raza peligrosa. En la actualidad, en la capital tienen la condición de animales potencialmente peligrosos las razas pit bull terrier, staffodshire bull terrier, american staffodshire terrier, rottweiler, dogo argentino, fila brasileiro, tosa inu, akita inu y dogo del Tibet.
Cuando el propietario de uno de estos animales solicita la autorización municipal, debe presentar un impreso con una fotografía, dos fotocopias del DNI, una fotocopia completa del seguro de responsabilidad civil donde consten las garantías contratadas y el resguardo bancario o de la compañía de haber satisfecho el importe de dicho seguro; un certificado de aptitud psicológica y física, homologado por el Colegio Oficial de Médicos o en su defecto expedido por centros psicotécnicos; y un certificado de antecedentes penales.
Los agentes comprueban que toda la documentación requerida está en regla y emiten su informe a favor o en contra de la concesión de la autorización.
Esos 196 canes suponen el 2,9 por ciento del total del censo, y ganan terreno respecto al año pasado, al incrementarse su número desde los 189 contabilizados en 2018. El número de altas durante 2019 fue de 17 frente a las 29 del año anterior, mientras que las bajas fueron 24 y 16, respectivamente.
Denuncias. La tenencia de animales de compañía se regula a través de una ordenanza municipal, creada para dar respuesta a «la creciente presencia de los animales de compañía en la vida cotidiana del hombre». En ella se dice que son animales de compañía «los animales domésticos o domesticados cuyo destino sea ser criados y mantenidos por el hombre, principalmente en su hogar y con fines no lucrativos».
La normativa municipal regula los deberes de los propietarios, la circulación por la vía pública, transporte y entrada en establecimientos o la identificación y censo de los animales. En el capítulo 5 se regulan las infracciones y sanciones, que solo durante el año pasado sumaron un total de 134 frente a las 107 del año anterior. Son infracciones leves poseer un perro sin estar censado, no comunicar su muerte o desaparición, el abandono de animales muertos en la vía pública o la no recogida inmediata de los excrementos y las micciones en fachadas de edificios, paredes o portales. Las graves son causar la muerte o maltratar a los animales, su abandono o tener perros considerados potencialmente peligrosos sin licencia.
Esas infracciones acarrearon, según especifica la Policía Local en su informe, un total de 46 denuncias en asuntos relativos a perros domésticos, mientras que fueron los de raza peligrosa los que sumaron un mayor número de denuncias con un total de 88. Llama la atención el hecho de que su número se ha incrementado sustancialmente respecto al año anterior, cuando se cursaron 60 propuestas de sanción.
En definitiva, la regulación de la tenencia de animales de compañía en el término municipal, que incluye tanto el establecimiento de un censo como la recogida de animales abandonados, de la que se encarga Scooby Palencia Adopta, supone una carga de trabajo a tener en cuenta. Solo durante el año pasado, la Policía Local realizó 425 actuaciones relacionadas con este asunto.