La temporada de caza menor en Castilla y León arrancó ayer en la provincia y parece que lo hizo con esperanzas y perspectivas optimistas, especialmente en el caso de la pieza estrella de estos meses, la perdiz. Cientos de cazadores palentinos sacarán a partir de ahora sus escopetas para salir al campo y disfrutar hasta el domingo 26 de enero de esta práctica, después de que hace semanas concluyera la media veda.

Perdices, conejos y liebres, a las que en unas semanas se unirá la becada, serán las protagonistas de una temporada que se presenta «bastante positiva», destaca el delegado provincial de la Federación de Caza de Castilla y León, José de Luis Cantero.

 Dependiendo de la zona y del cuidado que se le haya prestado al campo y a los terrenos, se podrán encontrar comarcas con más o menos presencia de ejemplares, a lo que se suma que las condiciones meteorológicas de esta primavera no han sido las más favorables para la cría.

No bastante, en el caso de la perdiz, la reina de la temporada, los profesionales aseguran que «ha criado bastante bien» en Palencia, aunque no se pueda decir lo mismo de otras provincias. «Se han visto numerosas polladas y hay esperanza de que durante la temporada podamos divertirnos con ella», asegura De Luis Cantero. De hecho, considera que, en general, «parece que está mejor que otros años, aunque eso solo se podrá ver en el campo según avancen los meses».

Respecto a las zonas en las que previsiblemente pudieran encontrarse más perdices, parece que El Cerrato y Tierra de Campos serán más propicias.

Respecto a la población de conejo, parece que se presenta «irregular», pues se detectan zonas con mucha abundancia y otras en las que no se ven tantos ejemplares. «La incidencia de la tularemia ha afectado pero, a pesar de los casos de mortandad, hay zonas con un número suficiente de conejos como para disfrutar», argumenta el delegado provincial de la Federación de Caza de Castilla y León.

Respecto a la liebre, aunque la mixomatosis ha hecho de las suyas en esta especie, aún así se pueden ver por el campo. «Parece que sí hay liebres, pero nos gusta aconsejar a los cazadores que se las castigue lo menos posible para que los galgos puedan correrlas, de esta manera, podemos preservarlas y disfrutar todos de ellas», explica de José de Luis.

Por otra parte, parece que este año se pueden encontrar palomas en abundancia. «No es una pieza de preferencia en la provincia, pero hay gente que va a cazarlas y este año se va a encontrar con muchas en sus salidas», añade.

caza mayor. Por otra parte, desde el 23 de septiembre los aficionados al jabalí disfrutan de su caza en monterías y ganchos, pues parece que la temporada se prevé que sea excelente. Pero el notable aumento de la población de jabalíes en la provincia y en toda la región invita a la precaución, pues la masiva presencia de estos animales está provocando daños a la sanidad animal, la agricultura, el sector ganadero, la fauna protegida y la seguridad vial.

Precisamente su implicación en un importante número de accidentes en carretera hace que se llame a la precaución, pues cada vez son más los incidentes que se producen por este motivo.

En la actualidad, los cazadores no pueden multiplicar por dos las cacerías colectivas, monterías y batidas, una ventaja que antes se llevaba a cabo para controlar la población de jabalíes en la comunidad. De ahí, que los titulares de los cotos de caza puedan agotar el cupo de cacerías por derecho y si continúan los daños causados por estos animales, pueden solicitar a la Junta un aguardo o espera nocturna al jabalí (caza de noche en un lugar donde el animal acude asiduamente).

Ante la temporada que se acaba de iniciar, desde la Federación Provincial de Caza se indica que, «pese a las grandes diferencias que tenemos por parte de grupos que presionan y denuncian, el criterio de la Junta y la Federación es muy moderado», apunta De Luis. El responsable del colectivo en Palencia añade que «se va a elaborar una ley de caza acorde a la sentencia que se dictó tras su supresión, en la que se incluirán las conclusiones de un trabajo de campo minucioso, con recuentos y piezas».

En su opinión, lo importante es hacer las cosas con moderación y sentido deportivo, para que todas las partes disfruten y aprovechen los recursos.