Cosgaya vive la crisis sanitaria en Hungría

David del Olmo
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El campeón del mundo de piragüismo en 2009 reside en Budapest, aunque viaja una vez al mes a España por trabajo. Debió suspender su última visita debido al confinamiento

Cosgaya vive la crisis sanitaria en Hungría

El piragüista Diego Cosgaya anunciaba oficialmente su retirada hace dos años, cerrando una brillante trayectoria que le subió a dos podios mundiales y tres continentales como principales éxitos, tras los cuales estableció su residencia en Budapest (Hungría), donde trabaja en el sector del transporte internacional.

Una ocupación que hasta la crisis sanitaria le traía a España una vez al mes, por lo que vive desde la capital húngara su particular confinamiento, distinto al español: «aquí de momento la situación es distinta. No hay tantos afectados, unos 700 y han fallecido 32 personas [cifras del martes]. Comparado con España, aquí es muy poco. El confinamiento es distinto también. Te permiten salir a la calle con tu pareja y hacer deporte, separado a al menos dos metros de otra persona. Y para salir a comprar puedes ir al supermercado, aunque han delimitado un horario, de 9 a 12, para mayores de 65 años, y luego pueden ir el resto. Está bien para proteger a la gente mayor», destaca el palentino, que añade que «cerraron muy pronto las fronteras, cuando no había casos».

Además, «a la gente que tiene que guardar cuarentena, quien se la salte va a la cárcel. Y si por salir contagia a alguien, la pena se agrava».

La situación le ha afectado laboralmente, dado que «tenía que haber visitado a unos clientes e iba a aprovechar para pasar la Semana Santa con mi familia, pero tal y como estaba el tema ahí, decidí quedarme. La familia está bien también, así que me quedé. Hace un mes. Y todavía quedan un par de meses. Sé que la gente lo está pasando mal, familiares de amigos han fallecido, conozco varios casos».

Diego tiene familia en China: «Mi primo vive en una ciudad de 11 millones de habitantes y hace un par de semanas que empezaron a salir a la calle, con mascarillas, todavía haciendo las cosas poco a poco. Pero allí cuando pararon, lo pararon todo en seco».

DEPORTISTA. Cosgaya ya no se dedica profesionalmente al deporte, «aunque sigo entrenando lo que puedo. Hago bicicleta, carrera, gimnasio, piragüismo. De forma estoy bien, apenas tres kilos más que cuando competía», reconoce.

Aunque allí puede salir a practicar deporte de forma individual, en esta época que trabaja desde casa practica en ella, «con la bici estática, con el TRX [entrenamiento con correas de suspensión], estiramientos, saltar a la comba, un poco de todo».

De su Club Palentino de Piragüismo Lurpelan, «con algunos compañeros mantengo contacto». Y tampoco abandona su pasión por el río, «ahora en Hungría. Aquí estos días sí puedo, en España no podría».

Con respecto a su deporte, que en Hungría no es una disciplina más (hasta 80 medallas olímpicas acumulan sus palistas a lo largo de la historia), Cosgaya (que se quedó a las puertas de tres Juegos en su carrera), destaca que los palistas húngaros «siguen entrenando igual. Al final afortunadamente han aplazado los Juegos, porque mientras en España todos los deportistas estaban ya en casa, aquí estaban entrenando igual o más de cara a Tokio».

Porque, describe, «si yo que ya no soy profesional, en tres días que no entreno lo noto, los que se dedican a ello pierden toda la forma en unas semanas. Y todavía queda bastante tiempo de inactividad».