Un triunfo inapelable

Juan Antonio Lladós (EFE)
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Márquez gana en Japón con una carrera en solitario y consigue su décima victoria de la temporada, por delante de Quartararo y Dovizioso

Un triunfo inapelable - Foto: TORU HANAI

El español Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V) se adjudicó la victoria en solitario en el Gran Premio de Japón de MotoGP, que se disputó este domingo en el circuito Twin Ring de Motegi. En el podio le acompañaron el francés Fabio Quartararo (Yamaha YZR M 1) y el italiano Andrea Dovizioso (Ducati Desmosedici GP19).

Poco antes de iniciarse la carrera se supo que esta contaría con un protagonista menos, el español Tito Rabat, quien además de ser sancionado con salir desde la calle de talleres cinco segundos después de que partiese la misma, por montar un nuevo motor en su Ducati Desmosedici GP18 al estar ya "muy desgastado" el séptimo y último con el que podía contar para la temporada, se vio aquejado por las molestias en la muñeca derecha tras un accidente acaecido antes de llegar a Japón, que le hizo desistir de su intención de disputar la prueba.

Ya en la competición en sí, Marc Márquez no dio opciones a sus rivales en la salida, que realizó a la perfección para encarar en primera posición la curva de final de recta con Quartararo pegado a su rebufo tras superar a su propio compañero de equipo, el italiano Franco Morbidelli (Yamaha YZR M 1), quien de hecho perdió cuatro posiciones.

Maverick Viñales (Yamaha YZR M 1) no hizo una buena salida y del cuarto puesto que ocupó pasó a la séptima plaza al final de la vuelta inicial, con Jack Miller (Ducati Desmosedici GP19), Andrea Dovizioso (Ducati Desmosedici GP19) y Cal Crutchlow (Honda RC 213 V), por delante de él.

Márquez hizo su primera vuelta rápida en el segundo giro, en el que logró más de un segundo de ventaja sobre Quartararo, que fue el único que pudo aguantar el tirón inicial del campeón español.

Bien apuntado desde el muro, Marc Márquez protagonizó su segunda vuelta rápida en el quinto giro para recuperar el medio segundo que anteriormente le había quitado Quartararo y que le devolvía "cierta tranquilidad", pero siempre con el joven francés, de 20 años, esperando el error del campeón mundial.

La carrera se convirtió ya desde ese momento en una prueba de precisión milimétrica y cada giro en el que Fabio Quartararo recuperaba terreno a Marc Márquez, éste hacia lo propio al siguiente, manteniéndose las diferencias en todo momento en torno al segundo, hasta que llegado el ecuador de la carrera el piloto francés pareció arrojar la toalla al instalarse en los dos segundos de distancia.

Sólo un error de alguno de ellos podría propiciar un cambio de signo en el desenlace final, que daba nuevamente la victoria, décima de la temporada, al campeón del mundo del equipo Repsol Honda, por delante de Fabio Quartararo y Andrea Dovizioso, "achuchado" en las últimas vueltas por Maverick Viñales. Alex Rins (Suzuki GSX RR) fue séptimo y Joan Mir (Suzuki GSX RR) octavo, en tanto que Pol Espargaró (KTM RC 16) fue undécimo, con Aleix Espargaró (Aprilia RS-GP) en la decimoquinta plaza y Jorge Lorenzo (Repsol Honda RC 213 V), decimoséptimo.