Toyota presentó en la pasada Feria de Movilidad Sostenible de Zaragoza su primer vehículo de pila de combustible de hidrógeno comercializado a nivel mundial, el Toyota Mirai. Allí, los asistentes pudieron ver de primera mano cómo es este sedan que utiliza hidrógeno como fuente de energía y descubrir el funcionamiento de esta tecnología que solo emite vapor de agua al circular.

El Mirai no solo tiene un impacto medioambiental mínimo, sino que además ofrece todo lo que se espera de un vehículo de nueva generación: un diseño inmediatamente reconocible, confort de conducción así como una aceleración silenciosa y potente gracias a su motor eléctrico.

El perfil del Mirai conecta la parte delantera con la trasera en una agradable expresión continua de espacio. Crea un espacio sofisticado en el habitáculo con acolchados en las puertas y en otras superficies interiores, así como un acabado general cromado de alta luminancia. Los asientos delanteros se ajustan a la forma del cuerpo y lo sujetan a la perfección, gracias a un proceso de producción de espuma integrada en los asientos y las fundas.

El modelo alcanza una potencia máxima de155 cv. Es capaz de acelerar de cero a 100 km/h en 9,6 segundos y alcanzar los 175 km/h.

En lo que se refiere a la seguridad, el Mirai incorpora una completa gama de equipamiento como el sistema precolisión , el aviso de cambio involuntario de carril, el control de arranque y conducción, el control de ángulo muerto, etc.

Cuidado medioambiental

Esta novedad de Toyota es una alternativa de movilidad sostenible que  va ganando peso a escala mundial. Con un repostaje de entre tres y cinco minutos, similar al de los vehículos de combustión convencional, Mirai ofrece una autonomía superior a los 500 kilómetros. Gracias a esto, los usuarios no tendrán que modificar sus costumbres a la hora de utilizar el vehículo.

Toyota Mirai ya está a la venta en algunos países europeos como Reino Unido, Francia, Noruega, Suecia, Bélgica y Alemania, además otros donde su venta está más asentada como Japón.

El hidrógeno es el elemento más abundante en el universo. Se encuentra en casi todas partes, desde el agua hasta las plantas, y ya es lo bastante potente como para proporcionar energía a hogares y edificios.

Los coches que usan este elemento funcionan a través de un proceso electroquímico que se produce al mezclar hidrógeno y oxígeno. De esta relación nacen tanto energía, que se emplea para mover el motor; como agua, que se expulsa en forma de vapor, por lo que genera cero emisiones contaminantes.

En Toyota creen que se pueden derivar grandes beneficios medioambientales y sociales de la consecución de una sociedad futura basada en el uso de hidrógeno y otras fuentes de energía renovables, sin emisiones de CO2.