Pega la vuelta

Diario Palentino
-

Alejandro Martínez está convencido de que su equipo revertirá la situación. Considera el partido ante el Oviedo como una final

Pega la vuelta - Foto: Óscar Navarro

Pese a las cinco derrotas consecutivas, Alejandro Martínez, técnico del Chocolates Trapa, está totalmente convencido que tarde o temprano, a ser posible este domingo ante el Oviedo en elPabellón, el equipo morado reaccionará.

Reconoce que el equipo está tocado. «La moral hay que levantarla. El equipo, evidentemente, está hundido por las derrotas de manera consecutiva, por los partidos que no hemos terminado de jugar bien durante los cuarenta minutos. Jugamos una buena parte de ellos bien, pero en esta liga el que no juega cuarenta bien no gana. Ahora mismo estamos un poco picados, dolidos, bastante enfadados por la situación y con ganas de darle la vuelta. Dar la vuelta se consigue trabajando todos juntos, siendo fieles a las cosas que nos han llevado a ganar once partidos hasta ahora en una liga en la que entre el segundo, el Oviedo, y el décimo segundo hay dos victorias de diferencia, con lo cual está todo muy comprimido, con todos con muchos dientes de sierra. Es una liga muy extraña a todos los niveles, pero lo que realmente importa, que somos nosotros tenemos que intentar este domingo ganar, porque el equipo está haciendo muchas cosas bien, muchas también mal, pero más las buenas que las malas, pero hacerlas bien durante cuarenta minutos.Para ello hay que salir muy concentrado ante un rival como Oviedo que lo está haciendo muy bien en las últimas jornadas».

Alejandro Martínez se siente mal «porque no consigo que mis jugadores estén jugando bien al baloncesto, analizando qué ha pasado de cuando ganábamos a ahora. La verdad es que considero que ahora mismo tenemos una falta de confianza importante. También sé que con dos victorias eso se acaba, pero hay que conseguirlas y no lo estamos haciendo. Veo al equipo muy atenazado, muy frustrado y hay que conseguir cambiar eso, No es sólo parte del entrenador, aunque evidentemente el entrenador tiene una cuota importante a la hora de conseguir que los jugadores puedan tener esa confianza y esa fe en las cosas que estamos haciendo, peo también hay una parte que les atañe a ellos y estoy seguro que ellos están igual de preocupados y enfadados que yo. Vamos y tenemos que tratar entre todos de revertir la situación, que ahora mismo es muy complicada.Por otro lado, es cierto que tenemos once victorias, que estamos en ese pelotón de equipos que estamos en play-off, que una victoria te va a hacer subir tres puestos, que en caso de ganar al Oviedo les adelantaríamos, pero claro una derrota nos pone en una situación complicada y con ganas de darle la vuelta».

Del play-off sigue pensando que «queda muy lejos, basta ya de pensar en pajaritos preñados y pensar en ganar partidos y a final de temporada mirar al puesto que hemos llegado. Lo importante es llegar bien al play-off, sentirte bien durante el tramo final de competición, los meses de marzo y abril. Pero para llegar bien a ese momento hay que hacer un muy buen mes de febrero y final de enero que fue un poco lo que pasó cuando yo llegué el pasado año aquí. El equipo estaba en una situación delicada, con 9-13 y quedaban doce partidos y  llegó muy bien a los play-offs, en los que pasó lo que pasó, pero con el equipo con buen feeling, muy redondito y eso es lo que tenemos que tratar de conseguir, que el equipo llegue así, que los jugadores confíen en sí mismos, que todos se sientan importantes, que creo que es así, aunque jueguen más o menos, que no salgan al campo pensando cuánto voy a jugar, sino qué soy capaz de hacer en estos minutos que estoy en el campo, que muchas veces da la sensación que estamos saliendo al campo a ver cuánto tiempo juego. No, lo primero es salir al campo a hacer cosas, a sumar cosas para el equipo  , ya sea un minuto, cuatro, veinticinco o lo que sea».

Sobre el Oviedo tiene un gran concepto. «Están jugando con mucha soltura, con mucha confianza, muy parecido a cómo jugaba Palencia en las primeras jornadas, en la que parecía que todo fluía, que siempre encontrabas el tiro perfecto, que siempre encontrabas la manera de anotar muy sencilla.  Muy sueltos, muy fácil y tenemos que tratar, siendo un partido en casa, que queremos y pretendemos ganar, ser duros en defensa, tratar de jugar bien el rebote porque es un equipo que va muy bien al rebote ofensivo, tratar de ser sólidos en el rebote y, bueno, ir jugada a jugada, minuto a minuto, cuarto a cuarto, no plantearnos un partido de cuarenta minutos, sino cuarenta partidos de un minuto, tratando de sumar, de ir siempre por delante en el marcador y de estar con buenas sensaciones, olvidar lo que ha pasado y las derrotas que llevamos hasta ahora. Los partidos que hemos perdido ya no los podemos ganar, sólo podemos ganar los que quedan de aquí hasta el final de competición. El de Oviedo es un partido importante y hay que tratarlo como si fuera una final».