El Club Atletismo Villamuriel cerraba una temporada atípica en la que ha tenido que lidiar con las medidas sanitarias impuestas por el Covid-19. Sin embargo, el club cerrateño se muestra contento con los resultados obtenidos en la presente campaña.

Los atletas comenzaron la temporada en diciembre, bastante tarde en comparación con otros años, pero las restricciones de las autoridades provocaron que el inicio tuviera que retrasarse aún más. De esta manera, empezaron entrenando en grupos de seis. «Primero lo hicimos en la era del pueblo, más tarde en el colegio y por último en el pabellón de baloncesto. También tuvimos un período en el que entrenábamos en el césped porque no teníamos otra instalación para hacerlo», asegura César Fernández, presidente del Club Atletismo Villamuriel.

Para los villamurielenses ha sido una campaña complicada. Las condiciones no eran las idóneas desde el primer momento, pero supieron adaptarse a la situación y cerraban la temporada logrando varios triunfos, algo  bastante meritorio para tratarse de un club humilde en una situación tan especial.

Temporada de éxitosLos atletas que corrieron defendiendo el escudo del Villamuriel sumaron en torno a 50 niños, 40 de ellos federados y 10 sin estarlo. De todos ellos, destacaban bastantes actuaciones individuales. Por ejemplo, la del benjamín Alonso Moreno, que ha conseguido cuatro oros y terminaba invicto. Sobresalió en las pruebas de 500 metros y lanzamiento de vortex.

También la benjamín Nuria González tuvo una actuación exitosa la pasada temporada. Fue tercera en pruebas combinadas en el Campeonato de Castilla y León, segunda en 50 metros y primera en salto de longitud.

Otro de los benjamines más laureados este año fue Erick Cano, que acabó cuarto en pruebas combinadas, tercero en 500 metros y ganó el relevo 4x50 metros en el que compitió al lado de Alonso Moreno, Rodrigo Matía y Adrián Estébanez.

En la categoría alevín el conjunto cerrateño no consiguió traer ninguna medalla para Villamuriel, aunque los chicos del club tuvieron unas actuaciones para aplaudir. La joven Sara Estébanez fue sexta en salto de altura, Noelia Inclán, cuarta en lanzamiento de vortex y Aitana Arruquero, sexta en esta misma disciplina deportiva.

Ya en la sección de infantiles, Pablo Soto se hacía con la medalla de plata en lanzamiento de disco y Noelia González fue quinta y sexta en 150 y 500 metros, respectivamente. Además era el primer año de la pequeña atleta, lo que aporta a sus logros un valor añadido por la dificultad que entraña.

CAMPUS DE VERANO. Una vez terminada la temporada regular, el Club Atletismo Villamuriel organiza un campus en la etapa estival para que los niños puedan pasar unos días en relación directa con el deporte junto a sus compañeros.

La acogida por parte de los miembros fue espléndida. César Fernández, presidente del club, afirma que «el año pasado tan sólo tuvimos a diez participantes», mientras que este han conseguido reunir a casi 30.

En contraste con el verano pasado existe una mayor flexibilidad en cuanto a las restricciones sanitarias y los pequeños se animan a apuntarse a eventos de este tipo.

Este campus no está destinado solo a personas del club, sino que cualquier niño que lo desee puede disfrutar de sus servicios. De hecho, este año son siete los jóvenes que no son miembros del conjunto cerrateño.

En él se llevan a cabo actividades relacionadas con cuatro deportes: atletismo, fútbol, baloncesto y gimnasia artística. Además, los monitores preparan otros ejercicios como yincanas o juegos en la piscina, a la que acuden los miércoles.

Pero sin duda, lo más original del campus son las semanas temáticas que se preparan para los participantes. Este año han recreado la Tomatina de Buñol, los Sanfermines pamploneses, el Carnaval de Tenerife, el Grand Prix del verano, que por cierto ha sido la que más ha gustado a los niños, y los Juegos Olímpicos, en los que han realizado distintas pruebas que se desarrollarán próximamente en Tokyo, así como el encendido de la llama de la antorcha olímpica, entrega de premios y diversas actividades relacionadas con la gran cita internacional.

El club espera que la próxima temporada pueda desarrollarse con mayor normalidad para que los deportistas realicen sus entrenamientos desde el principio y disfruten lo máximo posible del deporte sin tanta limitación.

Sea así o no, el Club Atletismo Villamuriel seguirá dando el callo en la pista. Durante todo el año han demostrado que para el deporte no hay impedimentos, y ahí están esos grandes resultados obtenidos a pesar de la delicada situación por la pandemia.