Hay quienes prefieren investigar en centros de vanguardia dotados con la más moderna tecnología, otros se decantan por los circuitos cerrados provistos de costosos aparatos y también existen aquellos que eligen estudiar sobre el terreno. Eso es, precisamente, lo que ocurre en la carretera CL-615, de titularidad autonómica, que se ha convertido en un auténtico laboratorio de pruebas en sus casi cien kilómetros de recorrido, los que dista la capital de Guardo.
Allí se han implantado en los últimos años distintos sistemas de seguridad encaminados a reducir la siniestralidad de esta vía que vertebra la provincia de norte a sur, y que es la principal -en muchos casos la única- conexión con la capital para municipios como Velilla del Río Carrión (a través de Guardo) Guardo, Saldaña, Carrión o Villoldo, por citar los más poblados.

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