Un grupo de familias ha cursado una solicitud para que la Junta de Castilla y León posponga el concurso de traslados de maestros de infantil y primaria del próximo curso 2020-2021, así como la cancelación del posible «concursillo» para el mismo periodo. El motivo es que considera que «aunque pueda causar algún trastorno en algunos profesores, pero debe primar la defensa de los más débiles y vulnerables, es decir, los niños».

El motivo de su petición tiene que ver con la pandemia del Covid-19 y la suspensión de las clases presenciales, lo que ha hecho que «durante estos tres largos meses los alumnos han visto limitada su socialización a un único medio de contacto con sus compañeros de clase y profesores, las plataformas de videoconferencia, «con las que los alumnos han generado un vínculo especial tanto con el resto de alumnos como con su profesorado».

Ante la certeza de lo que ocurrirá el próximo curso y ante una posible nueva cancelación del curso presencial, estas familias consideran que el concurso de traslado de maestros «implica que muchos alumnos al año que viene tendrán que cambiar de profesor».

«Nuestro temor es qué podría suponer una nueva cancelación de las clases presenciales combinada con un profesor nuevo, con maestro desconocido, para niños con edades menores a 8 años. Tendrían que relacionarse con un profesor al que no conocen y con el que no les une ningún vínculo afectivo», argumentan.

«No nos parece nada razonable que no se haga todo lo posible para poder ofrecer a nuestros hijos una educación de calidad y en las mejores condiciones», aseveran en un escrito dirigido a la consejería de Educación y al director provincial.