La Compañía de Saldaña de la Guardia Civil despedía la pasada semana al que ha sido su capitán durante los últimos cinco años, el asturiano Valentín Escobar Álvarez. Un experimentado profesional con una dilatada trayectoria de cuatro décadas que desde la capital de La Vega ha prestado servicio a los pueblos del oeste de la provincia, con puestos en localidades de mayor tamaño como Guardo, Saldaña o Carrión de los Condes y también en otros mucho más pequeños pero igualmente importantes para el Cuerpo como Becerril de Campos o Buenavista de Valdavia. Una tierra de la que se lleva muy buenos recuerdos y que ahora deja, al menos en lo profesional, para hacerse cargo de la Compañía de Avilés. 

¿Qué balance hace de estos cinco años al frente de la Compañía de Saldaña?
Antes de instalarme solo había estado en Palencia de paso, y desde que llegué me sentí muy a gusto, tanto con los compañeros como con los vecinos. Tan bien he estado estos cinco años en la provincia palentina que me he comprado un apartamento en la zona para venir en mis ratos libres. Solo puedo decir cosas buenas de Saldaña y de Palencia. 

¿Valoran los palentinos el trabajo de la Guardia Civil?
Aquí se nos valora y se nos quiere, la sociedad nos tiene como a uno más. Llevo 40 años en la Guardia Civil en destinos como el País Vasco, Valencia o Ibiza, y en ningún sitio se tiene el cariño y el aprecio que demuestran los palentinos a la Guardia Civil. Todo son apoyos por parte de la sociedad y los políticos, tanto de un partido como de otros.

Esta gratitud por parte de la sociedad palentina se hacía efectiva con la entrega de un reconocimiento por parte del Ayuntamiento de Saldaña por la labor de auxilio de la Benemérita durante la pandemia
Para mí y para mis guardias ha sido una cosa muy importante, porque realmente se pasó muy mal. Al principio los medios escaseaban, no había las protecciones suficientes en las residencias y centros de salud y había un caos generalizado, cuando encontrar una mascarilla o alcohol era complicado. 
Nosotros colaboramos mucho canalizando las donaciones de particulares, que entregábamos en la Comandancia de la Guardia Civil de Palencia para su distribución entre la gente que más lo necesitaba como centros de salud u hospitales. 

¿Ha sido la suya una labor más sancionadora o informativa en todo lo relacionado con el Covid -19 y el cumplimento de las restricciones que han ido imponiendo el Gobierno y la Junta por recomendación de las autoridades sanitarias?
Hay determinadas conductas que, indudablemente, hemos tenido que proponer para sanción, pero nuestro espíritu ha sido siempre el de informar a los palentinos.

¿Ayuda o dificulta trabajar en el medio rural?
El trabajo en el medio rural es más fácil, aunque hay que saber el lugar que ocupa cada uno. Me relaciono con todo el pueblo y la gente me ha sabido valorar.

¿Cuáles son las principales infracciones que se cometen en su ámbito de actuación?
Tenemos muy poca delincuencia autóctona de gente que vive y delinque en la zona, y la poca que hay está muy controlada. Los pueblos pequeños son muy tranquilos, y si vamos a poblaciones más grandes como puede ser el caso de Guardo hay delitos de lesiones y casos de violencia de género, pero en general esta zona es muy tranquila. 
Por otro lado, sí que están subiendo mucho lamentablemente las estafas por Internet, porque cada vez su uso está más extendido, y hemos detectado varias plantaciones de marihuana.

¿Qué necesidades tiene actualmente la Guardia Civil en Palencia? ¿Cuenta con los efectivos suficientes la que ha sido hasta ahora su Compañía?
Es una plantilla bastante fija en la que se cubren las plazas vacantes, por lo que andamos bien servidos de personal. Hay pueblos pequeños, con un personal más reducido, y otros más grandes, con más efectivos, pero nuestro servicio es las 24 horas al día. A nivel de vehículos y de material, tampoco tenemos queja. 
La Compañía de Saldaña (oeste de la provincia,en una línea imaginaria a partir de la CL-615) cuenta con unos 120 agentes, siendo los puestos de Guardo y Saldaña los más grandes, con 20 y 15 guardias civiles, respectivamente. También hay dos patrullas del Seprona, una con base en Saldaña para la zona sur de la Compañía y otra en Guardo, desde donde se da servicio al Parque Natural Montaña Palentina.