De una un otra forma, siempre suele haber en cada edición del torneo el denominado derbi de los Campos Góticos o Sergio Asenjo. El choque entre el Ave María y el San Juanillo, dos equipos que comparten instalación.
Es habitual porque el cuadro aurinegro suele presentar varios equipos, en esta edición cuatro. Este año no podía ser menos, con un pronóstico, por otro lado, no muy claro. El Ave María juega en la Segunda División, ocupando la última plaza, sin haber ganado ningún partido.Pese a todo, era cabeza de serie, dado que la mayor parte de los equipos alevines de primer año juegan en Tercera, entre ellos el San Juanillo C, que lidera la categoría. Cabeza de ratón y cola de león, se podría decir.
Decisivo fue en el primer cuarto Leo, que con su velocidad, calidad y fuerza desarboló al cuadro rojinegro, marcando el tanto que le daba el triunfo en el primer cuarto. Un año de diferencia de edad se nota y por ello sólo se permite jugar a un niño por cuarto alevín de segundo año, pero fue suficiente para marcar las primeras diferencias.
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El derbi de Campos Góticos - Foto: Eva Garrido
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Los dos segundos cuartos fueron muy igualados, tanto que nadie fue capaz de marcar. Se llegaba entonces al último y definitivo sin estar el partido decidido. Aitor le daba fuerza, sentido y calidad al juego del Ave María, pero en el San Juanillo hacía lo propio Antonio, primo del jugador del Palencia Cristo Atlético Miguel Blanco. Suyos fueron los goles que sellaron el triunfo. El tercero de Jorge, el otro alevín de segundo año, apuntilló al Ave María, aunque finalmente no se sumase al marcador al llegarse a la diferencia de tres goles por cuarto.