El Destino Palencia afronta la recta final del campeonato en la LEB Oro, ya sin opciones de alcanzar el play-off de ascenso a la ACB, aunque con la obligación a priori de jugar sus dos últimos compromisos en el horario unificado que afectará a los equipos que se jueguen alguna posición en los partidos restantes.

El conjunto morado, que solamente aspira a abandonar la décima plaza (siempre y cuando gane un partido más que el Almansa, noveno de la tabla que le tiene ganado el basketaverage) debe medirse en los dos últimos choques al Palmer Alma Mediterránea Palma y el HLA Alicante.

Ambos partidos están previstos para las 12,30 horas de los dos próximos domingos. El primero, en el polideportivo de Son Moix, ante un rival que ocupa la séptima plaza (la última que da acceso a las eliminatorias), con una victoria de ventaja sobre el Valladolid (en la última jornada habrá un Valladolid-Palma), al que ganó en el enfrentamiento directo por 17 puntos.

De manera que el conjunto balear se juega mucho en el envite, pues si gana y el Valladolid no lo hace en su visita a Granada se asegurará estar presente en la última fase del curso. En cambio, si el Valladolid gana en Granada no podría asegurarse aún la clasificación al quedar su duelo directo por disputarse el siguiente domingo.

ÚLTIMA FECHA. En cuanto al Alicante, que ya está clasificado para el play-off (sexto, a una victoria del quinto y con dos de ventaja sobre el octavo) aunque pierda los dos partidos que le quedan, deberá jugar ante el Breogán y ver cómo acaba la jornada para ver qué tiene en juego en su visita a Palencia. 

Siempre y cuando el Alicante no tenga ya nada en liza el último día, podría ser factible un cambio de fecha del encuentro al tradicional viernes, que a buen seguro los de Pedro Rivero verían con muy buenos ojos, de cara a preparar con más tiempo su participación en los cruces decisivos.

En todo caso, los palentinos, que en juego sí tienen el orgullo de acabar la temporada ganando uno o dos partidos más, son ahora jueces.